Buscando trabajo

2 de Marzo del 2010 - Diego Cózar Rodíguez (Cangas del Narcea)

Debe haberse producido un terrible error. A terrible mistake must have happened. Que se vea desde ya que aquí hay nivel de inglés, pero que se vea también el quid de la cuestión y es que ya llevo un par de semanas buscando trabajo y todavía no estoy trabajando. Todos sabemos como va, al final los papeles deben pasar por un montón de manos, no todo esta lo debidamente informatizado y terminan al cargo de algún eventual recién contratado que termina por traspapelarlos, ya sabes, siempre es el nuevo el que la acaba cagando.

Todo esto resultaría trivial de no ser porque mis habilidades y monolítica formación académica siguen desperdiciándose, y de no ser por las iniciativas personales me pasaría los días mirando el techo u analizando el ritmo de crecimiento de la hierba de algún parque. Total, que empiezo a preocuparme, pues si bien el paro forzado al principio fue bienvenido y recibido como si se tratase de un necesario periodo vacacional, ahora la inactividad empieza a aburrirme, y tengo claro que esto debe ser culpa de alguien.

Y es que algún tintarra por ahí debe haberla fastidiado, porque no me han llamado para ofrecerme el puesto de redactor jefe de algún gran periódico, ni me ha llamado la junta directiva de ninguna caja de ahorros para ofrecerme un puesto, ni me llueven las ofertas para puestos ejecutivos de esos de cinco mil euros al mes, ni Tarantino me ha llamado para codirigir su nueva película ni Spielberg para protagonizar su nuevo proyecto, ni Mick Jagger ni Valdano me han llamado para sustituirles, y ni Zapatero ni Obama han quedado conmigo para preguntarme mi opinión sobre el actual panorama económico internacional está claro, a alguien se le debe haber pasado darles mi número.

¡Vamos mundo, despierta! Estoy dispuesto para trabajar. ¿Por cuánto tiempo puedes permitirte dejarme en barbecho? ¡Vamos! Antes de que me canse de esperar, el tiempo corre y se me están empezando a inflar las pelotas.

Y es que la cosa esta fea pero la fama cuesta, eso ya lo sabíamos todos. De momento seguiré chapuceando por aquí, a lo que salga. Con lo que tengo ya montado y con lo que vaya montando, porque él que quiera peces que se moje el culo. Ahora mismo estoy pendiente de una suculenta oferta para reponer máquinas expendedoras, avalado por mi permiso de conducir de clase B y mis cinco años de estudios universitarios que me hacen sentirme casi preparado.

Pero es en estos tiempos de crisis en los que los hombres de verdad se revelan como tales, y es que la cosa no está tan mal como nos quieren hacer creer, siempre quedan opciones, entre ellas la de reponedor en supermercados, repartidor de casi cualquier mierda, camarero a media jornada trabajando sólo dieciocho horas diarias, vendedor de droga, prostituto, o Dios no lo quiera político.

Después de todo es mejor reírse, es lo más serio. Y a falta de algo mejor seguir mandando curriculums a Decathlon e Inditex (Amancio, we love you) a ver que pasa, y además siempre nos quedará Mcdonald´s. Una pena no calzar una noventa y cinco generosa para pasar el trago poniendo copas y echando sonrisas, pero qué se le va a hacer, gracias Dios por ser hombre y joven, ya se sabe.

Por último aprovechar el viaje para pedir trabajo de verdad y si alguien se entera de algo que pegue un toque, pero que no lo pegue muy alto no vaya a ser que me levanten el puesto. Que sí, que sí, que arrieritos somos y por el camino nos encontraremos y no me pongas esos ojos, cordera.

Entretanto a lo mío, que no es poco y a pasar el trago. Seguir poco a poco domando palabras y amaestrando ideas, y gracias, que seguro que los hay que están mucho peor. Y si no, puerta y carretera, a tirar millas, que otro vendrá que bueno me hará, tiempo al tiempo.

Más en: http://diegocozar.wordpress.com/

Cartas

Número de cartas: 45941

Número de cartas en Septiembre: 45

Tribunas

Número de tribunas: 2083

Número de tribunas en Septiembre: 5

Condiciones
Enviar carta por internet

Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.

» Formulario de envío.

Enviar carta por correo convencional

Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:

Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo
Buscador