La hipocresía de algunos

El fichaje de la mujer del presidente del Gobierno por el Instituto de Empresa se ha colado como “trending topic” en las tertulias televisivas y en la prensa escrita y no escrita. Licenciada en marketing, con "20 años de experiencia", según destaca el Instituto de Empresa, dirigirá el recién creado Centro de Estudios Africanos, dependiente de la Fundación IE. Criticar sin tener ni puñetera idea de lo que decís y escribís, la señora de Pedro Sánchez se llama Begoña Gómez y es una profesional muy cualificada con su trabajo, pues lleva más de veinte años dedicada a ello en importantísimos puestos de dirección, o sea de "regalo" nada.

Que Gómez es Licenciada en “marketig” y directiva del Grupo Inmark en excedencia y cuenta con un máster en Cooperación Internacional y "20 años de experiencia en consultoría y en docencia". Por otro lado, es un puesto de trabajo en una empresa privada, sí que es un instituto internacional muy bueno y de reconocido prestigio, pero se lo han dado porque ella es una gran profesional. Y además, tanto criticarla los mediocres del PP y Ciudadanos, que siempre embarran todo, este puesto lo tenían aceptado dárselo antes de que Pedro Sánchez presentara la "moción de censura". Por lo tanto, menos envidias y cotilleos baratos hacia personas bien preparadas y estudiosas, no como otros que les tienen que "regalar" los títulos.

Ella es una profesional y lo ha sido siempre (al contrario que otras consortes de presidentes del PP que sólo ejercen de "señora de..." o "primera dama"), su profesionalidad la avala. Imaginen que alguien fichase a Michele Obama o Hilary Clinton como asesoras legales, no sería un enchufe, no podemos olvidar que estas dos mujeres eran más brillantes que sus maridos, aunque estos ganasen la presidencia norteamericana por el machismo imperante en todo el planeta.

Caso muy diferente son aquellas personas que por enchufe, no es que accedan a estudiar un master, es que se les regala, y para más recochineo, se les obsequia con calificaciones superiores que aquellos alumnos que se han esforzado.

Que Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, entre a presidir un cargo recién creado en una fundación que recibe fondos públicos y privados suena mal, ¿por qué? Es cierto que se trata de una mujer con amplia experiencia laboral, licenciada en “marketing”, y con un máster en cooperación internacional. Si esto es así, no veo porque los chismorreos y críticas hacia esta mujer. ¿O es que por ser la mujer del presidente del Gobierno de España no tiene derecho a trabajar y tener un buen puesto de trabajo que se lo ha ganado durante muchos años de trabajos en distintos puestos muy importantes? Esa es la diferencia esencial entre el currículum de Begoña Gómez y el de las docenas, quizá cientos, de candidatos/as que -supuestamente- optaban al puesto

Respecto al nuevo trabajo de Begoña Gómez, las críticas sólo denotan el machismo imperante en este país. La esposa del presidente del Gobierno tiene todo el derecho del mundo a continuar con su carrera profesional, porque es su vida privada y ella ni cobra ni ocupa ningún cargo público. No decíais nada cuando Ana Botella, siendo Aznar presidente, trabajaba en la Administración, algo más cuestionable que hacerlo en una empresa privada. Y luego llego a ser alcaldesa de Madrid (para desgracia de los madrileños), como era del PP, entonces todo está bien.

Si no trabaja, mantenida y retrógrada; si trabaja, malo también. Acabaremos creando una asignación para esposas de presidentes con cargo al erario, es nuestro sino. Lo que ya queda chusco hasta extremos delirantes es que la “peperada”, reyes del cohecho propio, acuse a alguien de cohecho impropio por trabajar. Pero si existe alguien que reciba una excelente oferta de trabajo y la rechace porque un familiar suyo tenga un alto cargo público, que tire la primera piedra.

¡Última hora! Rajoy no ha renunciado a la dotación a la que tiene derecho como expresidente: ya la ha pedido. Pobrecito, cómo va a renunciar si el sueldo de registrador no le da para vivir. ¿Y en qué consisten esos privilegios? Dos empleos de libre designación a su servicio, una dotación para gastos de oficina, un coche oficial con conductor incorporado y la posibilidad de acceder de forma libre y gratuita a transportes terrestres, marítimos y aéreos del Estado, y una escolta designada por el ministerio del Interior (unos 500.000 eruos anuales, calculo yo) más viajes gratis por tierra, mar y aire. Esto habiendo hecho mal su trabajo. Si lo llega a hacer bien...

Faustino Gómez Pérez

Gijón