Peligro inminente
No puedo evitar denunciar lo que veo al pasar en mi vehículo por la carretera que une Oviedo con Ules y con el Club de Campo del Centro Asturiano, del que soy socio y asiduo visitante. A pocos metros, dejando a mi derecha el aparcamiento de los Monumentos, en el monte Naranco, giro la vista a la izquierda. Dos vallas azules observo, y en un instante se me para el tiempo y pienso: una, de sal hermanada a una segunda de azúcar, que supuestamente sirven de parapeto a dos socavones en el asfalto... un mal sueño despierto, aquello es precisamente lo que me da miedo. ¡Peligro inminente!, protegido por un medio de seguridad a todas luces insuficiente. Sin luz, con lluvia y algún "animal" sin escrúpulos que las retire o se adueñe de lo que no es suyo, el porcentaje de un accidente grave es mayúsculo. La carretera es estrecha y será en estas fechas transitada por mucho e inusual tráfico y variada locomoción que por esta vía se desplazará diariamente. Mucha frecuencia de autobuses públicos y privados, abarrotados; camiones pesados de obra y otros de carga, ciclistas, caminantes osados y, a partir del viernes 31 de agosto, que comienzan las grandes fiestas del Centro Asturiano, miles de vehículos durante 10 días, en su interior desplazando a familia, amigos, animosos todos, que regresarán después de disfrutar de un preciosista entorno y participar de su elenco de actividades en honor a nuestra patrona de Asturias, la virgen de Covadonga. Esos dos agujeros en el cemento, huecos, al lado de las ruedas de nuestros medios de transporte, huelen a tragedia, a familias rotas, a sollozos de abuelos, padres, a llanto de nuestros pequeños... un daño irreparable, un posible e injusto “km. 0" nos acecha. Y aquí no hay sitio para el destino ya que son una clara advertencia. Espero y deseo que quien sea el responsable, ¿quizás el Ayuntamiento?, lo repare y llegue a tiempo... Que nuestra sal y azúcar no se las lleve el viento y que nuestro Alcalde, presidente de Asturias y presidente del Centro, la realeza y otros estamentos varios no tengan que asistir a ningún, de estas características, duelo ni sepelio. De regreso, en este punto giro la vista a la derecha. Dos vallas azules observo y en un instante se me para el tiempo y pienso... Tengo las fotos.
José Antonio González Martínez
Oviedo
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo