La burocracia selectiva
Supongo que muchas personas estarán hoy en la misma situación que yo. Resulta que a día 17 de octubre la Universidad de Oviedo todavía no nos ha abonado el importe correspondiente a la segunda parte de la ayuda “Erasmus”, el 30% de la concesión total.
La Universidad nos hizo saber en verano que el pago sería en septiembre como tardísimo, debido a un incremento en la cuantía de las concesiones. Sin embargo, ahora me han dicho que hasta dentro de un mes nada.
El Vicerrectorado de Extensión Universitaria y Proyección Internacional de la Universidad de Oviedo debe hacer de una vez por todas su trabajo y abonarnos una ayuda que es nuestra legítimamente. También sería de recibo que se depurasen responsabilidades por este retraso injustificado e irresponsable por parte de la Universidad, pero lamentablemente supongo que un retraso de casi cuatro meses (a muchas personas de otras universidades les han ingresado en julio) no será, por desgracia, suficiente motivo para que alguien se dé cuenta de que las cosas se han hecho mal, muy mal.
Cabe reflexionar y preguntarse muchas cosas. ¿Por qué a la hora de abonar los costes de la matrícula no se permite un retraso? ¿Por qué, sin embargo, a las personas que estudiamos en esta Universidad se nos condena a la demora? ¿Por qué la desidia siempre nos toca sufrirla al último eslabón de la cadena, pero que al fin de cuentas es el más importante?
De momento, un mes más de espera, pero no nos vamos a callar.
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