La Nueva España » Cartas de los lectores » Muera la inteligencia

Muera la inteligencia

27 de Octubre del 2018 - José Luis Peira (Oviedo)

Es razonable pensar que los representantes más o menos electos de una sociedad deberían debatir los asuntos que fueren a unos niveles de corrección y con cualidades argumentales que los aproximen al mundo de la gente civilizada y de paso arrastren al resto de la sociedad por esa senda. Porque uno piensa que, si no es así, más vale ahorrarnos el gasto y dirimir los asuntos a las puertas de las tabernas a guantazo limpio.

Algunos de esos prebostes parece que no encuentran más camino que inclinarse a lo pedestre, alarmados al pensar que se les están escapando las gallinas por un agujero. Nada de autocrítica, de meditar qué hicieron mal todos estos años en los que alegremente dilapidaron, cuando no robaron, y mal gobernaron a una sociedad a la que indiscutiblemente se le ha estrechado el bienestar.

La última, a día de hoy, la protagonizó nada menos que en la Cámara de representación máxima el número uno de la oposición, jaleado, por si quedaran dudas, por toda una serie de “talking heads” que cumplen la función de la clap en un esfuerzo elocuente de chocar las palmas como el que más, no vaya a ser que le bajen a uno cinco puestos en las siguientes listas. Que es de lo que se trata. Este señor, vamos a decirlo claro, no es más que un niño pera al que le han regalado parte de sus estudios, por mucho que por vericuetos legales se haya escapado como un conejo en lo jurídico. Como no es más que otro mediocre ha acudido a pedir auxilio espiritual al amo del calabozo, ese hombrecillo que se cree tocado por unos superpoderes de cómic, haciéndole renacer esa ansia de gobernar el partido y la patria desde las sombras, trampantojo que le salió mal con su anterior elección, pero que hoy reverdece. Y tan contento que está.

El pánico a la fragmentación de la derecha y la ultraderecha, territorio uno, grande, libre y propio, los autoriza a cualquier cosa. El único líder del ancho mundo que no ha reconocido que mintió como un pirata con lo de las armas de destrucción “más IVA” para meternos en una guerra que hizo el mundo peor es ahora el consejero psíquico de este niño bien y le está animando a usar la faca y el garrotazo a traición, lo que sea con tal de recobrar el cortijo de papá. Así están las cosas. Yo no tengo mucha ideología, pero sí biblioteca e internet, y suelo acudir a ambos con acostumbrada tozudez para comprobar que invariablemente los actos irresponsables de quienes estaban para aportar mesura y optaron por el camino facilón de apelar a mensajes simples en los que se inocula el resentimiento y la ira relegando el raciocinio no llevaron nunca más que a la calamidad.

Pero claro, todo hay que decirlo. Cuando uno ha visto estos días a obreretes criticando el proyecto de subir los salarios mínimos cacareando y propalando el discurso del amo y el banquero, reconoce que el poder de Mordor tiene en verdad el brazo largo, y que tiene, como se cuenta en las Dos Torres, capacidad para mandar un invierno donde le dé la gana y a cualquier hora. ése es el estigma de la derrota. O de la victoria, según se lea. Amén.

Cartas

Número de cartas: 45279

Número de cartas en Mayo: 123

Tribunas

Número de tribunas: 2046

Número de tribunas en Mayo: 8

Condiciones
Enviar carta por internet

Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.

» Formulario de envío.

Enviar carta por correo convencional

Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:

Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo
Buscador