La Nueva España » Cartas de los lectores » El fantasma del pacto educativo

El fantasma del pacto educativo

30 de Noviembre del 2018 - Darío Martínez Rodríguez (POLA DE SIERO)

Nos decía Platón que en lo más profundo de la caverna sólo podíamos contemplar fantasmas. La imaginación y como mucho el asiento seguro de una creencia ajena a la verdad eran la causa segura para poder explicar dichos fenómenos sujetos a la mera conjetura, a la perpetua duda, a la confusión. Hoy perfectamente nos vemos inmersos en esta situación, lo ya planteado por Platón se nos vende como posverdad. La caverna es el lugar ideal para forjar mentiras ilusionantes con fuertes cargas de emoción y con la intención de atrapar a la mayoría. El propósito es mantener inalterables los privilegios de unos pocos y repartirlos en recintos de poder independientes. Un mecanismo de superación de falsos poderes en un marco como es el de nuestro país sería el Estado, entendido como sujeto político que en su hacer diario debería velar por la igualdad de sus ciudadanos y construir un marco legal orientado a la justicia. Un Estado débil y dividido no tendrá la capacidad de obligar, de ir por encima de los feudos autónomos de poder cuasi caciquiles.

En suma, en este país es imposible alcanzar un pacto de Estado por la Educación (ya no digamos nacional, idea maldita asociada al binomio incólume España/Franco) porque el Estado no está capacitado para tal fin, y no lo está por su imposibilidad para habilitar mecanismos que perseveren en el interés común. Dicha quimera es un fantasma que se nos vende como posibilidad abstrayendo una realidad administrativa a nivel educativo que se resiste a tener nada que ver con un proyecto que aspire a lo mejor para conjunto de los ciudadanos españoles. Es obvio que tal pacto iría en beneficio de todos pero desde las periferias de este país lo que se quiere es lo mejor de los suyos, por supuesto fomentado su hecho identitario. Esto facilita una relación asimétrica que estrangula cada vez más a las regiones más pobres. Mermando la capacidad del Estado hasta la anorexia, desalojando a la escuela pública de sus recintos de acción, controlando lo ya debilitado a nivel autonómico, el posible pacto educativo es simplemente imposible. No es casual, si causal, que entre las comunidades autónomas donde la escuela pública ocupa un porcentaje más reducido sean el País Vasco y Cataluña. No es casual, si causal, que sea en ellas donde más se pugna por la secesión, fragmentación, de España. Por cierto, su apuesta nacionalista y liberal cuenta con el salvoconducto de muchas de nuestras erráticas izquierdas.

Cartas

Número de cartas: 45552

Número de cartas en Julio: 13

Tribunas

Número de tribunas: 2069

Número de tribunas en Julio: 2

Condiciones
Enviar carta por internet

Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.

» Formulario de envío.

Enviar carta por correo convencional

Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:

Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo
Buscador