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Bush y sus muertos

14 de Diciembre del 2018 - Javier Arjona (Siero)

A las andadas y con repetidas seudoargumentaciones vuelve el señor Corostola pidiéndome específicamente que le conteste por este medio a su defensa cerrada del Bush que la historia marca como asesino de masas en sus actuaciones como director de la CIA, vicepresidente con Reagan, y presidente por un periodo de gobierno yanqui.

Para ello puedo utilizar el singular o el plural, pero nunca "mayestático" sino humilde, basado en que son opiniones de sustento colectivo, que afectan y sostienen muchas personas, no solamente en nuestra tierra asturiana, sino en la agredida Nicaragua, en la Panamá invadida por orden de Bush a menos de un año de su mandato, donde a rajatabla se daba la instrucción de asesinar a gente inocente en zonas donde no había resistencia, (veánse sobretodo los Informes oficiales de NNUU, y si se quiere las crónicas desde el terreno de Maruja Torres, y las fotos que dejó antes de ser asesinado por los marines yanquis el fotógrafo español Juantxu Rodríguez..) pero por supuesto también en dónde en legítima defensa a su país agredido algunas personas panameñas estaban efectuando su particular 2 de mayo ante la agresión extranjera.

Menos datos directos, de opinión directa de sus gentes, podemos tener de los millones de vietnamitas, de los millones de iraquíes, afectados por las políticas de Bush, pero para eso ya está la ONU y sus Informes nunca controvertidos para dar fe de las maldades, hechos de guerra y de muerte protagonizados por Bush padre y por Bush hijo.

Nadie puede blanquear eso: es imposible señor Corostola pretenderlo como usted hace:

Pero el único nuevo aporte que nos procura en su carta en LNE es que quienes se manifestaron contra la presencia humillante de Bush en Oviedo, con dinero público y privado, eran y éramos violentos y por lo mismo los palos estaban bien dados. Además de ser una afirmación brutal en sí misma, es fácilmente contrastable por las decenas de personas heridas, las fotos disponibles en los archivos, y nuestro testimonio, que vale, vaya si vale mucho más que las excusas hueras de quienes vanaglorian al yanqui en ínfulas de justificar sus crímenes, recogidos por siempre por la historia que se quiere desconocer.

No señor. Los policías ese día en Oviedo tenían órdenes de actuar duro y cumplieron esas órdenes procedentes del vicepresidente Cascos.

No señor, los manifestantes que salieron de la plaza del Ayto. de Oviedo y llegaron hasta el Campoamor estaban rodeados desde antes de empezar por centenares de escoltas sin uniforme y se situaron como siempre frente al muro de policías de uniforme y las vallas colocadas en la plaza del Teatro. Las cargas policiales empezaron sin ningún sentido, y las detenciones se hicieron aleatoriamente o no, con un modus operandi que fue determinado como un triste actuar en grado alto de torpeza, porque alguien de muy alto rango así daba las órdenes.

Y las cargas policiales, de dureza extrema que dejó las heridas mayores y en mayor grado, se produjeron cuando las personas se dirigieron ante el hotel Reconquista, sin dejarlos llegar, precisamente porque frente a hotel donde se estaba produciendo la comilona es donde está situada la comisaría donde se habían trasladado los detenidos cuya libertad se exigía.

Ese día señor Corostola se humilló a Asturias y se humilló a la ciudad de Oviedo lamiéndole las botas a un asesino, pero más todavía intentando acallar el derecho a la protesta frente a esa humillación antipatriótica de gentes que habían conocido en directo las tropelías de Bush en Nicaragua, habíamos visto en directo los cadáveres quemados por la Contra financiada y creada por Bush, con dineros de la droga colombiana (caso Irán-Contras, ya expuesto al público por las propias autoridades gringas).

Esa "legalidad" americana que usted defiende no era tal: se trató de un operativo criminal donde quedaron vulneradas multitud de leyes norteamericanas: el tráfico de drogas para financiar a un ejército ilegal como fue la "contra", el traslado y tráfico de armas en que quedó como chivo expiatorio el militar Oliver North, y el lavado y tráfico de dineros en cuentas suizas para amparar esa macrooperación con resultados terribles para cientos de miles de personas.

"Rezuma ideología" por todos los poros esa y las otras escenas del prontuario criminal de Bush, al que ahora se quiere presentar como anodino presidente, aupado a sus altos cargos institucionales por la impronta de los millones adquiridos por su padre en el tráfico de petróleo texano hacia la Alemania nazi, (ilegal, ilegítima, criminal y antipatrióticamente), y con similar comportamiento de otros presidente elegidos en USA: pero es que este Bush, además, actuó específicamente contra un país tan pobre y humilde como Nicaragua destruyéndolo y causando decenas de miles de muertos, (con sentencia incluida de la Corte Internacional de Justicia de la Haya, que condena a USA por sus actividades militares y paramilitares contra Nicaragua, cuantifica en 38.000 las víctimas fatales, en 17mil millones de dólares en destrucción de puentes, escuelas, hospitales y el minado de los puertos ), una Nicaragua donde centenares de personas de origen asturiano fueron a alfabetizar, aprender, cosechar café, o simplemente a protestar a cuerpo contra la intromisión criminal yanqui, siguiendo la senda de otro asturiano, que en funciones de cura católico se había involucrado hasta el tuétano contra la desigualdad, la prostitución infantil, el terrorismo de estado impuesto por una Guardia Nacional inventada por los marines gringos.

Un curita de la cuenca minera de cuya muerte se acaban de cumplir 40 años, y se está recordando por todos los rincones de Asturias.

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