PP (Pater Patriae o Perros Peligrosos)
Aún no se había finiquitado el recuento de votos de las elecciones andaluzas cuando, con trémulo rostro y fuego en las pupilas, compareció ante la TV el líder de Podemos para darnos una lección de democracia, respeto a los votantes y una inequívoca asunción de los resultados electorales. Conminó a sus "perros de presa" a salir a la calle a defender sus "democráticos" ideales de ultra izquierda y culpó al PP y Cs de la irrupción de VOX. Claro está que él y su familia estarán a buen recaudo en su chalet de nuevo rico y enviará al frente a los de siempre, es decir, a sus pagados "pitbulls" encabezando una tropa de infortunados ciudadanos dolidos de su propio fracaso, de su desdicha o de su fanatismo. Es la misma receta que aconsejaron a Chavez y Maduro en Venezuela y por la que cobraron una suculenta minuta. Los que están pagando la factura son los venezolanos privados de democracia, libertad y en la miseria más absoluta.
La raza a la que pertenece el tan democrático dirigente no es peligrosa ni por su tamaño, ni por la fortaleza de sus fauces; lo es, como sucede con algunas especies, el dragón de Komodo es un ejemplo, por el veneno que segrega su saliva. Un ligero mordisco es suficiente como para apiolar a quien lo sufre. En fin, que aunque de apariencia inofensiva, cuando apertura sus fauces para emitir sonidos, infecta a sus oyentes con su tóxico esputo. También lo es por su perfecto dominio del camuflaje, como lo demuestra su irrupción en el liderazgo del 15M, siendo la voz de los "indignados" por deshaucios, paro de larga duración y demás víctimas de la brutal crisis que sufrió nuestro país. Pero al enseñar la patita por debajo de la puerta, con casos como los de Venezuela o Irán, puso en evidencia su verdadera condición.
Este "pater patriae" (PP) de nuevo cuño es adicto al uso, más bien al abuso, de la palabra "democracia". Cuando sale de su boca lo hace ya prostituida, sin significado, sin ningún valor. Es como el ladrón que diserta sobre honradez, el promiscuo de fidelidad o el traidor de lealtad. Supongo que serán reminiscencias de un pasado arcaico, aún no superado y nostálgico. Algún día se enterará el citado (PP) que: la democracia es la forma de organización social que atribuye el poder al conjunto de los ciudadanos, pero eso los "demócratas" del pensamiento único, del partido único, de la clase única y de todo lo único, jamás lo comprenderán.
La culpa de la irrupción de Vox no es de los aludidos en las tóxicas intervenciones del bisoño PP, es de los que creen que España no existe, de los que se alían con separatistas y con los herederos de ETA, de los que no han comprendido nunca que la democraciaA es patrimonio de todos los ciudadanos, que jamás consentirán que PP con coletas de corderos y fauces de carnívoros carroñeros la corrompan según su abyecta conveniencia.
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