Negociar vidas a cambio de tabajo
España está en crisis. Se acabaron las reservas para atender las necesidades sociales más urgentes. En junio nos subiran el IVA, a todos igual, a ricos y pobres, para recaudar ese dinero que necesitamos.
Pero es paradójico que mientras tando se gasten miles de millones anuales en atención a enfermendades derivadas del consumo del tabaco, y totalmente evitables, que ocupan también puestos en las listas de espera interminables de la saturada Sanidad Pública. Por otro lado, más de 50.000 personas mueren de forma directa por el consumo de tabaco anualmente en España.
La Ley de Prevención de Riesgo Laboral no se aplica al personal de la hostelería, ni a sus hijos en caso de mujeres embarazadas. Por el hecho de ser trabajadores de este sector deben de asumir que pueden estar expuestos al riesgo de las enfermendades, muchas mortales, que provoca el tabaco, sin protección alguna. Los sindicatos no dicen nada. La Inspección de Trabajo tampoco.
Pero la señora Ministra continúa esperando, buscando consenso, dice. ¿Hay que negociar la vida de miles de personas con alguien para implantar una ley? Gran poder tienen que tener los negociadores que se sientan al otro lado de la mesa de la señora Ministra ya que pueden negociar tantas vidas.
Bueno espero que tengamos suerte y que niestros hiljos mayores o menores de edad no regresen a casa impreganados del olor al tabaco, aúnque ellos no fumen y que los que quieran vivier sin respirar humo de tabaco puedan hacerlo. Eso parece que es lo normal, pero en España parece que hay que buscar consenso para ello.
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