El daño inmenso que Bush hizo... imposible taparlo
Pese a que haya anunciado en varias ocasiones su "retiro" de la controversia por él mismo iniciada epistolarmente, el señor Corostola persiste en su idea central de defender a Bush, un criminal de guerra como demuestra la historia, con un prontuario de millones de víctimas en todo el mundo, y en lo particular en Nicaragua en los años 80.
Lo demás son añadidos, sí, enrevesados y a veces alguien podría interpretar hasta muy exprimidos en sus propias autocontradicciones.
La interpretación de que deba dar explicaciones que en cada nota me pide podrían tener alguna utilidad si, como es el caso contrario, no le entraran por un oído y salieran por el otro, cada uno de los argumentos que exponemos en colectivo.
En la penúltima, además de estimar que no digo la verdad en una charla a la que no asistió pese a habérsele indicado esa posibilidad, y que un informante le habría contado otra versión (con lo sencillo que hubiera sido, ¿verdad?, haber expuesto en público las interpretaciones en el Valey), realiza la afirmación de que Gaspar García Laviana murió al margen de sus ideas católicas.
No.
Los cientos de personas que estuvieron en la presentación de otro libro distinto, "Gaspar G L visto desde Asturias", en Langreo, en actividad apoyada y presentada por LNE, pudieron escuchar la intervención decidida del "jefe", el provincial de la Orden religiosa en la que Gaspar profesaba, del Sagrado Corazón:
El provincial fue muy contundente y explícito en respetar y defender la opción de Gaspar, asegurando que jamás su Orden la había cuestionado ni se les había pasado por la cabeza ninguna "retirada", exclusión, o crítica al cura de la cuenca minera metido a guerrillero.
Reiterar o persistir en este intercambio epistolario sin sabernos escuchar nos hace obligado también repetir conceptos ya dichos: Su opinión es que no hagamos homenajes y Memoria de la vida de Gaspar, y la nuestra es la contraria, de que el cura guerrillero Gaspar merece esos y otros mucho mejores homenajes y recordatorios, y que si entregó su vida por la Justicia como casi todo el mundo le reconoce, no habría elementos para defender una política de olvido. Pero son simples opiniones diversas.
Sin embargo los hechos (como la destrucción feroz de Nicaragua por parte del gobierno de EEUU, cuantificada y sentenciada incluso por la Corte de la Haya) no pueden ser modificados a capricho. Tampoco, señor Corostola, la represión ejercida en Oviedo contra mucha gente, por negarse a avalar la besada de posaderas al genocida de USA, acción que usted intenta redimensionar justificándola, minimizándola o cuestionándola.
Es en ese contexto en que son referentes negativos los mencionados de algunos personajes de Iglesia: Obando en Nicaragua, Cipriani en Perú, Maciel el jefe de los legionarios de cristo en México.. y todos ellos emparentan en ideología de odio contra las mujeres y sus derechos, al igual que se valora en "retroceso de un siglo" en materia de derechos y equidad la alianza labrada en los inicios de este siglo entre la curia liderada por Obando y el ejecutivo presidencial en el país de Sandino.
Invitado queda, señor Corostola, a la siguiente presentación pública del comic de Gaspar, que va a ser en su propia ciudad de Avilés.
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