Accidente de Pumarín ¿Limitar a 30 km /hora?
En el editorial del 13 de marzo de LA NUEVA ESPAÑA de Gijón, su autor, en referencia al accidente ocurrido en Pumarín (Gijón) el día 8, defiende como medida fundamental para evitar tragedias semejantes limitar la velocidad a 30 km/h en buena parte de las poblaciones.
Pienso que la velocidad no es el problema. Quien, de verdad, sepa conducir no precisa de límite de velocidad alguno; mira hacia donde quiera dirigirse y hasta donde la vista le alcance, ve lo que hay, piensa en lo que puede haber y actúa en consecuencia. Habrá lugares en los que pueda ir muy por encima de 100 km/h, y otros, en los que apenas se mueva, con el embrague justo en el punto de fricción y el pie derecho encima del pedal del freno. El problema está en la falta de atención y en la mísera inversión de esfuerzo y trabajo que la mayoría de las personas dedican a la tarea de conducir, a sabiendas de, que de las acciones que lleven a cabo para ello pueden derivarse consecuencias como morir o matar. ¡Y lo saben! El problema, es que muchas personas conducen sin saber y sin querer aprender. A quien tenga la amabilidad de leer estos renglones se lo agradezco en el alma, pero, con su permiso, le haré unas preguntas: Usted sabe que ante un semáforo con luz ámbar fija (una de las circunstancias que se dieron en el accidente de Pumarín) debe detenerse, ¿lo hace? Todo el mundo lo sabe y, generalmente, se hace lo contrario. Cuando usted mueve un coche hacia atrás para estacionar o iniciar la marcha, ¿mira hacia atrás? Muy pocos lo hacen y, sin embargo, se pueden causar graves daños a un peatón despistado y a una velocidad ínfima. Todo el mundo sabe que mantener la distancia de seguridad correcta es vital, ¿usted la respeta? ¿Sabe hacer una frenada de emergencia con o sin ABS, en seco y en mojado, con o sin esquiva? Pues amable lector, si usted conduce y alguna de sus respuestas es negativa, mi última pregunta solo puede ser esta: ¿Cómo se atreve?
A los distintos gobiernos, respecto a su responsabilidad en el tráfico, sólo les pido tres cosas: 1. Que simplifiquen y reduzcan normas y señales; información, la necesaria, la superflua distrae. 2. Que legislen sobre criterios puramente técnicos; los políticos, o tienen una eficacia nula o -lo que es peor- contraproducente. 3. Que se aseguren de que quien desee conducir un automóvil sepa hacerlo bien; después que controlen. Ah, y por favor, no nos induzcan más miedo. Paraliza, o lleva a acciones inadecuadas y torpes.
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