Visto para sentencia
Esta semana en Madrid ha dado comienzo el juicio contra los que yo personalmente llamo golpistas en el proceso catalán. Después de muchos meses de "diles y diretes" se han puesto manos a la obra para desenmarañar el tejido de redes que estos señores tenían preparado para independizarse de nuestro país, España. Un auténtico golpe de Estado, aun sin levantarse en armas.
Los sucesos son muy claros para nosotros las gentes de a pie. Pero ahora empezarán las difíciles y tortuosas derivaciones que tienen nuestras leyes. Numerosos equipos de abogados, a los que nosotros no conseguiríamos pagar sus minutas trabajando toda una vida, intentarán cambiar los puntos por las comas, la insurrección por paseos matinales, los desacatos a las leyes de todos los españoles como meriendas en el parque, el golpear a las fuerzas de seguridad del Estado como una entrega de flores y una muestra de cariño hacia ellos.
Las leyes están para cumplirlas y si te las saltas es bajo tu responsabilidad. Si vas por una autopista a 170 y te detienen, no puedes decir que el sol a tu espalda no te dejaba ver el 1, del velocímetro y entonces tú pensabas que ibas a 70 km. Las leyes están hechas para evitarnos riesgos a nosotros y a muchas personas más. ¿Qué hubiera pasado si estos señores hubiesen conseguido lo que deseaban, qué habría sido de los millones de personas de Cataluña que están en contra de estos golpistas? Habría habido muertes, claro está, cosa que nunca deberá pasar. Según las noticias, el juicio será transmitido en directo a cientos de países y la fiscalía general del Estado español pide 175 años de cárcel para todos ellos. Esperemos y confiemos en que nuestros jueces cumplan con su labor y estos señores no se vayan de rositas y demuestren al mundo que en España se cumplen las leyes y no demos la imagen en la que España sea un país de fiesta y pandereta.
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