¿Qué desfibrilador necesita Europa?
Europa ha entrado en desvaríos y hemos de volver a recuperar los valores europeos de: unidad, democracia y libertad. Una Europa capaz de asegurar sanidad pública, educación pública, y seguridad social. Esa Europa es posible si se olvidan las disgregaciones de la izquierda defendiendo lo indefendible, abrazando nacionalismos o particularismos solo porque usan símbolos y soflamas de izquierdas; o si las derechas se olvidan de su falta de corazón para acoger y otorgar bienestar a todos. Nos encontramos ante una llegada masiva de inmigrantes hacia Europa. ¿Quiénes son los interesados en estos ríos de gente y muerte? No lo sé, pero la Unión Europea debería tener una política que no pase por dejarlos oportunamente ahogarse en el Mediterráneo o morir de miseria en campos de refugiados. A estos ríos de inmigrantes no los detiene ni la muerte ni las concertinas, pues al cruzar el Sahara queman toda posibilidad de retorno como Hernán Cortés, o literalmente se ha quemado su hogar en una guerra. Todo se va pudriendo. ¿Por qué no se hace nada para generar actividad y salvar no solo a Europa sino a todos?
Será preciso un Programa Europeo de Recuperación, que es como en realidad se llamaba el Plan Marshall. Solo que esta vez no sería para salvar a Europa (salvando de paso a EEUU), sino para realizar proyectos más allá de la UE que salvarían a Europa del desempleo y la precariedad (algo que la IA y la digitalización acrecentarán). Si dejamos que los sentimientos anti-otros aparezcan de la mano de partidos políticos que rechazan a ese otro sin brindarle ayuda (sin ver la muerte a millares en el Mediterráneo o la miseria en los campos de refugiados), si no hacemos que surja una gran actividad para que todos sean necesarios; si continuamos ciegos hacia la balcanización de España o de Europa permitiendo nacionalismos independentistas interesados (como demuestran las investigaciones que siguen la pista al dinero), si dejamos que aflore el sinsentido de que los problemas del otro no son nuestro problema, porque a nosotros ya nos es duro vivir en la precariedad del día a día, y somos otros que no tenemos que cuidar de los otros que son de otros. Pues qué queréis que os diga, me acuerdo de Martin Niemöeller: «Primero vinieron por los socialistas, y yo no dije nada, (...) Luego vinieron a por mí, y no quedó nadie para hablar por mí».
Alentamos el cierre de energías (térmicas y nucleares). Pero, si hay que ir a las energías renovables... ¿Qué tal llenar el desierto del Sahara de centrales termosolares? Daría empleo aquí y se llevaría riqueza más cerca de los inmigrantes, dándoles empleo allí. ¿Son ocurrencias? ¿Acaso es mejor debatir sobre ideologías (que esas sí habría que cerrar) e ir a votar y votar mal? Porque ya no hay partidos pro-humanidad, ni unidad, ni presupuestos, solo particulares partidismos. Habría que votar a personas por lo que propongan y puedan hacer y... ¿Qué hacemos con la deuda?
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