Ilusiones rotas, silencios responsables...
Sentado, esperando el atardecer de una vida complicada, leo, despacio, porque quisiera no entender las últimas noticias sobre abusos sexuales que entristecen mis ojos siempre amigos de ilusiones... lloraré, pero no en silencio, los daños ocasionados a la infancia soñadora de futuro, a la juventud abierta a la vida idealizada, a la vida en definitiva... lloraré, pero no en silencio...
Gritar..., muy fuerte, por tanto daño silenciado... Gritar..., muy fuerte, por la cobardía en la madurez... Gritar..., muy fuerte, por dejar pasar los años sin decir la verdad... ¡¡Cuántos abusos se hubieran evitado!!
No habrá refugio para el que abusa...
Tampoco habrá comprensión para el que calló a conciencia de que su silencio perjudicaría a muchos niños y jóvenes de generaciones futuras...
La prensa, seguro, es más inteligente que yo. Creo que debería haber puesto sobre la mesa el silencio, también responsble, de los que con una madurez consciente han preferido la ocultación a la publicación justa y preventiva.
Me gustaría no cansarme y estar dispuesto siempre a condenar:
Los abusos a menores...
Los silencios perpetuos de los perjudicados...
El bipartidismo moral de la prensa....
El convertir las iglesias y los conventos en "despachos de avestruz".
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