¡España, despierta y espabílate!
Cuando uno se para a reflexionar sobre lo que está pasando en nuestro país, acaba pensando, que quizás sea un raro espécimen que no encaja en la sociedad de su tiempo. Digo esto por la deriva que está tomando el problema que nos plantean los, a mi entender, levantiscos e irresponsables políticos y gobernantes catalanes, sin que parezca que le importe mucho a nadie.
Como puede ser que después de lo que se atrevieron a hacer en contra de la unidad de esta España, de la que ellos también forman parte, por mucho que se empeñen en demostrar lo contrario, sigan empecinados en pretender demostrar que tienen razón y que son víctimas de un supuesto estado opresor que los tiene casi maniatados y privados de libertades para hacer y deshacer en esa parte de España lo que ellos quieran sin contar para nada con el resto de los habitantes del conjunto de la nación.
Esto que nos están haciendo es de locos, estoy seguro de que si se tratara de Francia, como ejemplo, al día siguiente de plantearlo tendrían las tanquetas policiales y del ejercito en cada esquina de cada calle y ciudad de Cataluña. Nos toman por pardillos, y además nuestros gobernantes estatales, en mi opinión, se lo permiten todo. Llevan años haciendo en el extranjero propaganda contra España, que es su nación, y con nuestro dinero. Y a nivel central, parece que a nadie le importa. Tienen a un fantoche en Bélgica presumiendo de ser el presidente elegido de Cataluña y huido de la justicia española, gastando en vivir allí un Potosí, y aquí nadie pide ni rinde cuentas de dónde sale el dinero que ese, en mi opinión, alucinado irresponsable, está despilfarrando.
Ahora acaban de organizar una manifestación en Madrid con miles de simpatizantes de su causa (que también habrá costado un pastón) y presidida por el mismísimo presidente del gobierno catalán para protestar por que ciertos políticos de allí estén siendo juzgados, no por ser políticos como ellos dicen, sino por haber intentado faltar a las obligaciones que todos tenemos de respetar la Constitución y la unidad de España como nación de todos los españoles, incluidos ellos que también la aceptaron en su día.
Se echa de menos una defensa firme y bien argumentada por parte del Gobierno de la nación a nivel internacional, que desmonte cuantas patrañas e infundios contra España, en mi opinión, van contando en el extranjero los gobernantes de Cataluña, con el único propósito de internacionalizar su causa o lo que ellos llaman conflicto, que en mi opinión, no es más que un capricho y falsa ilusión de ciertos iluminados. Que pruebe a hacerlo en Bayer (Baviera) o en Baden-Württemberg, en Hessen, en Renania o en cualquier otro de los Länder o estados de la Alemania federal, a ver que les dicen. Nos toman por lelos o cachupines de tres al cuarto, y parece que nuestros gobernantes, o no se enteran o miran para otra parte. Que sigan así, ya verán a donde nos lleva todo este pasotismo.
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