¿Qué pasa con la declaración de bienes de los cargos públicos?
Nos estamos enterando, estos días de ciertos casos de exministros, diputados o senadores que no hacen bien su declaración de bienes como están obligados por ley a hacer cuando empiezan una actividad en la administración, pero que algunos "caraduras" se lo pasan por ahí, ya saben por dónde.
El diputado del PP Rafael Catala trabaja en el sector privado pese a carecer de autorización del Congreso de los Diputados. El también exministro de Justicia no ha recibido el plácet de la Cámara Baja para acometer las actividades que ha ido emprendiendo tras abandonar el Gobierno, con la moción de censura de Pedro Sánchez. Tal y como informan diversos medios de comunicación, la consecución de este permiso es necesaria para cualquier aforado que quiera compaginar su labor parlamentaria con el sector privado.
Por poner algunos ejemplos: tenemos el del exministro Rafael cátala, que se marchó del Congreso de los diputados sin haber declarado tres o cuatro propiedades que tenía y una empresa con su mujer. Igual le pasaba todos los años en la declaración de la renta a Dolores de Cospedal, se le olvidaba declarar algún piso, parcela o local comercial. Hay muchos más casos, pero como siempre la mayoría de ellos son cargos del PP, como no podía ser de otra manera.
Ahora mismo, Catalá es Diputado en las cortes (al estar en la Diputación Permanente) y preside la Comisión de Interior, y también tiene un puesto orgánico en el PP, dentro de su comité ejecutivo. Además, tiene otros empleos que no aparecen en su declaración de actividades, sin actualizar desde 2016, fecha en la que fue elegido diputado por Cuenca. Para más inri uno de estos trabajos es en un bufete de abogados, que curiosamente, era el encargado de defender los intereses de Renfe y Adif en el horrible accidente del ALVIA en Galicia, con la muerte trágica de 83 personas.
Ya en su momento, desde su puesto como secretario de Fomento, alegó que el accidente no tenía nada que ver con la alta velocidad. Falta a la verdad que ahora le salpica, ya que dicho bufete protege los intereses del tratado de alta velocidad entre España y la Meca. El actual cabeza de lista por Cuenca se enfrenta así a acusaciones de utilizar su poltrona particular para beneficiar los intereses clientelares del bufete de abogados al que a día de hoy asesora sin el consentimiento de la Cámara.
Y que me dicen de nuestra flamante ex vicepresidenta del Gobierno del PP, "Sorayita" para los amigos. La enchufaron en el Consejo de Estado al poco de abandonar la política (Según ella) y ahora ha encontrado un buen trabajo, en un bufete de abogados de alto standing y con fama internacional, y lo peor es que este bufete es el mismo que defendió casos para el estado cuando la Sr.ª Sainz de Santamaría era vicepresidenta del gobierno, y no pasa nada, además continuara con el del Consejo de Estado. (Veis como no hay paro, claro para esta gente)
Todo esto viene a cuento, porque el otro día, me comento un amigo, que tenía a un sobrino que habían elegido para formar parte de una candidatura para las próximas elecciones del 26M, en un ayuntamiento de una ciudad pequeña. Y que le habían dicho que tenía que hacer la "Declaración de bienes" como diría Rajoy "como Dios manda" y claro está, la hizo, es un chaval que trabaja y tiene una nómina, un trabajo y su piso y nada más pero a estos trabajadores-candidatos les obligan a hacer esto, pero a los grandes de la política, como estamos viendo todos los días se lo pasan, si por hay mismo.
Yo con estas líneas quiero denunciar estos abusos de los "jetas de alta graduación" y que lo tengamos en cuenta a la hora de votar, y otra cosa pedirles a todos los partidos políticos que se esfuercen por cumplir con la ley y no se rían de los ciudadanos y sus votantes.
Una reflexión de última hora: Decía Einstein que solo había dos cosas que eran infinitas: el Universo y la estupidez humana, y de la primera no estaba muy seguro.
Y aquí tenemos a Casado y Rivera para confirmar la teoría del sabio.
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