"Cuarto milenio" y Antonio Rico
Desde hace ya bastantes años vengo observando que los tres periodistas que escriben la columna diaria de crítica televisiva en LA NUEVA ESPAÑA y que la firman con el seudónimo “Antonio Rico” despellejan, con mucha frecuencia, a Iker Jiménez y su famoso programa. Desconozco si uno, dos o los tres son los autores de esos ataques tan furibundos, pero yo, que no soy crítico de nada y soy una simple persona a la que le encanta leer y aprender constantemente, no estoy de acuerdo con ellos por los siguientes motivos:
1. No sé si esos críticos saben que en diferentes universidades estadounidenses y europeas existen cátedras de Parapsicología.
2. Los invitados de “Cuarto milenio” no son, precisamente, unos engañabobos o estafadores: José Miguel Gaona es un prestigioso psiquiatra, doctor en Medicina “cum laude” (con honores), máster en Psicología médica y especialista en Psiquiatría forense y es una persona escéptica que aplica el método científico en sus investigaciones sobre fenómenos extraños; José Manuel Nieves es un periodista que desempeña el cargo de jefe del área de Ciencia en ABC; Juan Ignacio Cirac recibió el premio “Príncipe de Asturias” de Investigación Científica y Técnica en 2006, y así sucesivamente...
3. Iker Jiménez y todo su equipo demuestran, cada domingo, que tratan los asuntos que abordan con el máximo respeto y la máxima profesionalidad. Nadie puede dudar de esto, te atraiga el programa o lo detestes.
4. Estamos en el siglo XXI y los “Antonio Rico” que tanto defienden la objetividad, la racionalidad y la ciencia (yo también lo hago y es lógico que así sea) deberían saber que un científico que se precie debe poseer, ante todo, una mente abierta, flexible, para ser capaz de avanzar en sus estudios y ampliar las fronteras del conocimiento.
5. Es falso que sólo existe aquello que es demostrable en un laboratorio. La prueba: la multitud de testigos que han pasado por el programa y que se nota que no mienten ni buscan protagonismo.
6. Nadie está libre de vivir un fenómeno paranormal. Por eso, cuidado con reírse de estas cosas y pensar que son cuentos o tonterías: el día menos pensado te puede pasar a ti. Muchas personas que han pasado por “Cuarto milenio” no creían en fantasmas, espectros, apariciones... hasta que se toparon de bruces con lo imposible.
7. Está probado que estos fenómenos existen (informes policiales y militares así lo atestiguan). Otra cosa es que no se sepa su origen y que haya gente tan cerril que va de racionalista y científica y se niegue a admitirlo.
¿Qué pasa con el misterio en España? ¿Por qué no se le puede tomar en serio como en otros países de Europa? Los enigmas están ahí y no todo tiene una explicación que salte a la vista. ¿Es mejor mirar para otro lado? Opino que no.
Por cierto, ¿sabían los “Antonio Rico” que el eminente premio Nobel Santiago Ramón y Cajal y el relevante psiquiatra, psicólogo y ensayista Carl Gustav Jung, discípulo de Sigmund Freud, se interesaron por los fenómenos extraños? Sospecho que no eran unos incultos que se creían cualquier cosa y me da a mí que seguían el método científico. Y no, no soy un crédulo e ignorante por encantarme “Cuarto milenio” porque gracias a este programa he aprendido muchísimo sobre historia, ciencia, animales, etc, que ningún profesor me enseñó en el colegio (con todo el respeto para los educadores).
Sé que esta carta no les importará lo más mínimo a los componentes de “Antonio Rico” y que no voy a convencerlos absolutamente de nada. Y sé que continuarán en su línea. Aun así, aquí quedan mis reflexiones y, por favor, un poco de respeto para Iker Jiménez y su programa. Ya está bien de machacarlos.
Alberto Fernández Díaz
Las Regueras
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