Pasan los días, los años...
Legislatura tras legislatura, las personas elegidas por el pueblo se muestran incapaces de solventar los múltiples problemas que se acumulan en ciudades y poblaciones. Nadie se preocupa de dar carpetazo a obras comenzadas por anteriores corporaciones, dando la sensación de que como “ellos” no las comenzaron, pues no les atañe. Obras muy costosas, nunca inauguradas y que uno se pregunta si verdaderamente era necesaria su ejecución.
En sus programas electorales, como norma general, siempre se habla de obras de nueva ejecución y lo más llamativas posible, olvidándose de la realidad y de las necesidades diarias de los electores.
Y como me imagino que todo ello va por barrios, y todos tienen sus problemas en mayor o menor medida, voy a citar, entre otros, uno que ya comenté hace tiempo, que afecta a todos los ovetenses y que aún sigue en el “limbo”: depósitos de agua del Cristo, una obra acabada hace años, comenzada en el año 2009, con un presupuesto de diez millones de euros y que aún nadie ha sido capaz de ponerla en marcha, y más aún: parece ser que nadie es responsable. Probablemente habrá que efectuar nuevas obras para que algún día –esperemos no lejano–, entren en funcionamiento.
Instalaciones del antiguo Hospital Central de Asturias en el Cristo. Hace tiempo comenté en este mismo medio que se podían aprovechar algunas instalaciones para acoger todas esas sedes de distintos organismos oficiales que se encuentran dispersos por toda la ciudad; sin tener conocimiento a día de hoy si se están utilizando las antiguas instalaciones para algún cometido. En cualquier caso, el coste de la vigilancia de todas estas instalaciones dejaría “pasmado” a más de uno, sin duda.
Es competencia del Ayuntamiento de Oviedo el control de las calles en los diversos barrios de la ciudad y, a mi juicio, toda la zona del Cristo-Buenavista ha cambiado su fisonomía como consecuencia del traslado del Hospital Central de Asturias. Pese a que la llamada crisis acentuó el cierre de locales comerciales, cafeterías, etcétera, en diversas por no decir todas las zonas de la ciudad, se ha cebado especialmente en las mencionadas. Actualmente el tráfico en la avenida Fuertes Acevedo no es ni mucho menos de intensidad alta, constando actualmente y si no me equivoco de dos carriles en ambos sentidos. Creo que contando con un carril en ambos sentidos sería más que suficiente, permitiendo el aparcamiento en el otro carril, al menos para carga y descarga y poder facilitar de esa forma que los actuales negocios de la zona y los locales vacíos actualmente tengan algún atractivo para posibles emprendedores.
La zona del Cristo-Montecerráu es otra de las zonas complejas dado cómo se ha hecho la construcción en la zona. Montecerráu, pese a ser una zona de reciente construcción y viales amplios, es evidente que sufre de errores tremendos. Si uno observa un poco se dará cuenta de la inexistencia de un paso “peatonal” que comunique las calles Mieres y Joaquín Villa Cañal con la calle Asturcón. Como consecuencia de ello, toda persona que entre por estas calles, y aseguro que son muchas, en dirección al centro deportivo que se encuentra en la calle Asturcón o a cualquier otro lugar tiene que dar un tremendo rodeo como consecuencia de no dejar vial alguno que comunique estas zonas.
Finalmente, decir que la zona de Montecerráu ha dinamizado al menos toda la zona, pero entiendo que el Ayuntamiento tendría que poner orden en los alrededores, ya que, como consecuencia del crecimiento sufrido, se producen en algunas calles denominadas en su inicio “peatonales” verdaderos atascos y desprecio hacia la señalización existente. Hablo concretamente de las calles Álvarez Lorenzana, Baldomero Fernández y Víctor Sáenz. Estas calles peatonales se utilizan de forma masiva, convirtiéndolas en una “nueva” salida hacia Oviedo por muchos vehículos, ya que es una forma de evitar todos los semáforos de la avenida del Cristo. Como consecuencia de ello son evidentes los atascos y los vehículos que se dirigen hacia zonas que estaban destinadas a residentes. Calles por otra parte que están en pésimas condiciones, con adoquines deteriorados y que no hacen más que molestar al paso de vehículos.
Ya sé que todo son problemas en muchas zonas y lugares, pero lo que no se debe hacer es huir hacia adelante dejando todos los problemas por el camino sin resolver.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo