La Nueva España » Cartas de los lectores » Promoción de Derecho 1989-1994: "Los últimos del edificio histórico"

Promoción de Derecho 1989-1994: "Los últimos del edificio histórico"

15 de Octubre del 2019 - Luis Nogueiro Arias (Oviedo)

El sábado 5 de octubre tuvo lugar una reunión muy especial y entrañable en conmemoración de los 25 años de la finalización del último curso de licenciatura y nada menos que los 30 de nuestra entrada en la Universidad. Gracias al trabajo de los organizadores de este evento, los compañeros Jaime R. Roncero y José Pedreira, se formó un grupo de Whatsapp que pronto alcanzó más de un centenar de integrantes, logrando reunir finalmente a más 80 asistentes al acto conmemorativo (algunos viajaron desde fuera de España), para el que se contó con la colaboración del rector de la Universidad de Oviedo, que nos facilitó el acceso al Aula Clarín del edificio histórico, y que, junto con el Aula Escalonada, fueron los lugares más representativos de nuestra vida universitaria en la Facultad antigua de Derecho.

Se hizo la fotografía de grupo propia de estos eventos, rompiendo el hielo del reencuentro con unas bebidas servidas por la cafetería Oxford –lugar familiar para los estudiantes de Derecho de aquella época–, y tuvimos la oportunidad de pasar unos minutos en el Aula Clarín, sentados en los nuevos pupitres, y pese a su comodidad tuvimos la percepción seguramente real de que la clase reformada había cambiado más que nosotros, que nos seguimos sintiendo “insultantemente” jóvenes (porque lo somos). Y echando la vista atrás, Arturo Téllez, compañero de promoción pero que eligió seguir el camino del periodismo radiofónico, dio una amena charla de cómo era Asturias y la Universidad cuando comenzamos en el primero (Real Oviedo y Sporting de Gijón en Primera División, Indiana Jones en los cines, viajes interminables en autocar o tren para tantos compañeros que no eran de Oviedo, pagos en pesetas, televisión miniaturizada con dos canales, inexistencia de móviles o de internet). ¡Cualquiera diría que han pasado siglos! Cómo ha cambiado el mundo, pero nosotros con él. Y es que, como bien explicó en su entrañable discurso Jaime R. Roncero, nuestra generación ha sabido adaptarse notablemente a los cambios que la transformación digital ha requerido, pero sin perder ese punto de percibir la realidad sin intermediación tecnológica, “palpando las cosas”, leyendo en múltiples formatos pero sin abandonar el papel.

Hay que decir que nuestra promoción (1989-1994) fue la última que recibió clases de Derecho en el edificio histórico, que se remonta a principios del siglo XVII. Es verdad que no en todos sus cursos, únicamente en tercero de carrera (los cursos de primero y segundo fueron en el Seminario, y cuarto y quinto en la actual Facultad), pero las últimas clases de Derecho que allí se impartieron fueron las nuestras y finalizaron en junio de 1992. Nuestra promoción estaba formada por más de 800 estudiantes, distribuidos en cuatro grupos; resultaba difícil encontrar sitio en clase o en la biblioteca si no se madrugaba (actualmente las clases no superan los 80 estudiantes), lo que siempre resultaba un mayor inconveniente para quienes venían de otras localidades. Hoy día… ¡Qué fácil resulta descargarse los temas online y asistir en directo desde tu propia casa a una clase en la que todos –incluso el profesor– están en lugares distintos!

Tras ese acto inicial en la Facultad de Derecho de San Francisco, con múltiples abrazos y besos entre compañeras y compañeros, que en algunos casos llevábamos tanto tiempo sin vernos, se organizó un cóctel confraternizador en el hotel Regente, que tuvo su deriva final en un bar emblemático de aquellos años, la cervecería Plaká, donde pudimos seguir la fiesta escuchando los éxitos musicales de los ochenta y noventa hasta casi, casi la madrugada (y es que 25 años no se celebran todos los días: es más de la mitad de nuestras actuales vidas).

Resulta admirable la cantidad de estupendos juristas que salieron de nuestra promoción (notarios, registradores, diplomáticos, magistrados, catedráticos, secretarios de Ayuntamiento, técnicos jurídicos de la Administración, docentes, funcionarios, abogados, etcétera); también otros que supieron encontrar su lugar al margen del Derecho, pero a los que seguro que esta formación jurídica les ha dado un plus muy aprovechable en sus actuales actividades y vidas personales. Y quiero poner en valor, en mayor medida, a todos aquellos que tenían que desplazarse para estudiar o vivir alejados de sus familias, en ocasiones con estrecheces económicas, y que, sin embargo, han despegado profesionalmente al más alto nivel. Un ejemplo para todos los que lo tuvimos más fácil. Y no quiero olvidarme de un compañero cuya vida se truncó en el primer curso, Arturo Noriega, que seguramente el sábado hubiera estado con nosotros, pero que siempre estará presente en nuestros recuerdos.

Una estupenda velada que pone de manifiesto una realidad incontestable: el paso del tiempo dulcifica lo menos grato y potencia lo bueno, saca lo mejor de nosotros en nuestras relaciones con los demás. Y, desde luego, mis compañeras y compañeros, a los que sinceramente admiro profesional y personalmente, por su talento, cualidades y habilidades sociales, pusieron la mejor disposición, su sonrisa más envolvente, para generar mixtura en un grupo que ya nunca dejará de estar unido. Ojalá que en sucesivas convocatorias podamos seguir a la altura.

Cartas

Número de cartas: 48976

Número de cartas en Diciembre: 99

Tribunas

Número de tribunas: 2175

Número de tribunas en Diciembre: 3

Condiciones
Enviar carta por internet

Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.

» Formulario de envío.

Enviar carta por correo convencional

Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:

Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo
Buscador