Mi vecino es un facha
Estos días de convulsión y la previa declaración de “alerta antifascista” de Pablo Iglesias me han abierto los ojos. Desde ese día, doy gracias a los progresistas por hacerme saber que mi vecino del 5.º (votante de Vox) es un asesino deleznable, malicioso, macabro y perturbado: es un facha.
Por eso de la vecindad, hablo con él con relativa frecuencia y, aunque tarde, he podido deducir que es un facha repelente, por no pensar como la izquierda española. Debería presentarse ante el juez de guardia y autoinculparse por haber votado lo que ha votado. En todo caso, esto no pasaría si suspendiéramos las elecciones que no son democráticas; es decir, las que no gana un partido de izquierdas por mayoría absoluta.
A partir de ahora, en mi afán por desmarcarme definitivamente de cualquier apariencia de facha, y para evitar que grupos incontrolados de pacíficos activistas, ecologistas, marxistas, feministas, africanistas, y otros “-istas” subvencionados, me descubran y apaleen, prometo salir siempre a la calle con un lazo amarillo en el pecho; unos zapatos con cordones del color de la bandera de Bélgica; una pegatina de “Free Junqueras”; otra de “Spain, sit and talk”; un pin con la bandera de Cataluña; una gorra de CC OO; un brazalete de UGT; una camiseta de “HazQuePase”; un piercing en la ceja con la hoz y el martillo, y dos modelos de pasamontañas con los lemas “CDR por la paz” y “Tsunami Democràtic”.
Ítem más. Ante la evidencia de que los medios de comunicación de derechas son partidistas y, en cambio, los de izquierdas son “independientes”, prometo no escuchar más que la SER; no leer otra prensa que no sea “El País” o “Eldiario.es”; no ver más televisión que La Sexta y “Todo es mentira”; porque ellos, solo ellos, tienen la verdad.
Por cargarme de motivos y validar mi decisión, he consultado a la RAE. Dice: “Facha es traza, figura o aspecto, así como mamarracho y adefesio, en su acepción coloquial”.
Bueno, tengo que reconocer que mi vecino del 5.º es elegante, culto, tiene buena imagen, tolerante, respetuoso y honrado... por lo que he de deducir que, según la RAE, es coloquialmente, un mamarracho.
Por el contrario, los independentistas son visionarios pacifistas que nos empujan hacia la libertad, mientras socializan con la Policía y destrozan el mobiliario urbano en Barcelona; Pedro Sánchez prioriza España sobre todas las cosas; Quim Torra es un prodigio de conciliación y sosiego; Monedero, con la excepción de Pilar Rahola, el tipo más moderado y transparente de todos los tertulianos de la parrilla televisiva; Juanga Rufián, un estandarte del consenso y la solidaridad; Pablo Iglesias, enemigo de la casta y defensor de la Guardia Civil; Ferreras es el hombre mejor informado y más imparcial del país; Verstrynge y Willy Toledo, dos proletarios moderados, respetuosos y de palabras amables.
Por el contrario, los que crean crispación en este país son (por este orden): Rajoy, el Rey Felipe, el Padre Ángel, Inés Arrimadas, Amancio Ortega y el abad del Valle de los Caídos.
¡¡¡Cómo!!! Me he liado. ¿Mi vecino es el facha?
Saludos cordiales.
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