Gracias, vecinos, por los voladores
Pues si, como lo leen esta carta es para dar las gracias a un grupo (minoritario como siempre) de simpáticos y amables vecinos que recientemente, a las cuatro de la mañana, tuvieron a bien despertarme a mi y a cientos y cientos de cangueses con unos sonoros voladores, parece ser que los explosivos ya vuelven a estar al alcance de todo el mundo, porque los voladores son explosivos ¿O no? Habrá alguna ley que los regule, supongo. Imagino que estos simpáticos y adorables vecinos serian los mismos que me despertaron la noche anterior. Seguro que eran gentes desbordadas de felicidad y alegría y que no pudieron resistir la tentación de hacerme a mí y a la gran mayoría de cangueses participes de su felicidad y de paso despertarnos, ¡será por días para dormir! También quiero dar las gracias, como no, a nuestras autoridades locales y a los cuerpos y fuerzas de seguridad porque aunque no lo consiguieron impedir seguro que lo intentaron y también seguro que a estas horas andan detrás de la pista de los alborotadores . Estarían inmersas en un sangriento tiroteo con los activos y peligrosos carteles de narcotraficantes que asolan Cangas un día si y otro también o estarían jugándose la vida intentando detener a algún peligroso y sanguinario terrorista de los que abundan en este conflictivo y peligroso pueblo y que tan ocupados los trae, mal oficio el ser agente de la ley en Cangas ¡Un trabajo muy duro!
Estoy seguro que al igual que yo hay cientos de vecinos que estamos desbordantes de felicidad y muy agradecidos a estas gentes por habernos despertado, darnos la oportunidad de aprovechar la noche del sábado, no perderla durmiendo y hacernos ver lo contentos que estaban. Imagino la gente que esta ingresada en el hospital, los ancianos del asilo, la gente con problemas de sueño, los crios que luego hay que volver a dormirlos o simplemente la gente que a las cuatro de la mañana están en su casa y en su cama durmiendo que es y somos muchos. ¡Hay que ser animal para no pensar en eso! Aquí hay mucha gente a la que no nos gustan los voladores y menos a esas horas pero bueno, se soportan una cosa es el ruido y otra la mala fe de estos bárbaros ¿no tendrán día bastante que hay que tirarlos a esas horas? Eso es tener muy mala idea, no es que te guste la pólvora. Pero bueno, aquí como no manda nadie pues así nos va cada uno hace lo que le da la gana y al que no le guste a joderse y aguantarse, la ley no ya del más fuerte si no del más bestia y del más analfabeto. Se habla del problema del ruido en Cangas y de nuevas ordenanzas pero la solución no es hacer ordenanzas ni leyes, la solución es hacerlas cumplir, que esa ya es otra. Tenemos un pueblo sin orden alguno, ni se puede coger el coche ni se puede ir andando y ahora ni se puede dormir. ¿Hasta dónde estamos dispuestos a llegar? En Grecia llevan unos días con problemas de orden, hacia falta no llegar a eso aquí aunque al paso que vamos no se.
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