Sr. Gabino de Lorenzo

Como se atreve hacer críticas, señor Gabino de Lorenzo.

Este Alcalde tiene un problema importante, critica al gobierno de Zapatero por las últimas medidas tomadas ante la crisis, y entre algunas cosas que dice, ¡asómbrense!, malgastar en planes inútiles como el plan E.

Con estos planes de fondo estatal en inversión local usted proyectó, aprobó y se financiaron muchas obras en Oviedo. Si observó que era un derroche absurdo, ¿por qué cogió ese dinero y realizó obras innecesarias? Si califica de malgasto y obras inútiles dicho Plan, solo nos queda seguir observando de que casta está usted hecho: ¿quién proyectó tales obras inútiles?, ¿acaso fue Zapatero? ¡Hay que tener la cara muy dura para caer en tanta demagogia e incoherencia! Zapatero no malgastó nada, ustedes los alcaldes fueron quienes destinaron el dinero.

Quien no le conozca, se piensa que está ante el protector de los pobres, el mariscal de la austeridad, cuando muy pocos alcaldes han dispuesto de tanto presupuesto en sus manos. Por recordarle y ponerle al día, desde su entrada a la alcaldía, y por higiene de la democracia, debieran de hacer auditoria obligada no sólo en su municipio, sino en todos, sobre: adjudicaciones del suelo y empresas públicas, utilización de fondos estructurales y de cohesión (que llovían de Europa como el maná) como Fondos Mineros, etc. y el uso de una larga lista de subvenciones estatales y otras partidas presupuestarias de impuestos directos e indirectos, como ingresos por concesiones y valores patrimoniales (plusvalías, obras, reformas, viñetas, multas, etc.) que en sus manos fueron dispuestos en despilfarro constante (lo del despilfarro definido más adelante) y subidas de impuestos al ciudadano, solo recordar aquel famoso catastrazo.

¿Dónde invirtió tanto presupuesto? En obras faraónicas, como el campo de futbol para una sociedad anónima como el Real Oviedo, que por aquella le amaba mucho, tanto como a su compañero de partido Ovidio Sánchez. Selor Gabino, si yo estuviera cerca de usted, huiría como cura endemoniado con amigos así, los enemigos son gatitos tiernos estimaba a los dos, y a los dos los quiso soterrar vivos. Al Real Oviedo creando y patrocinando otro club, con la firme idea de hacer daño, ya que no se limitó a apostar por otro, sino que, moldeó escudo, camiseta y nombre de aquel querido club Astur, tratando de urgir en la herida del por entonces agonizante Real Oviedo.

Qué decir de aquel escrito que le dedicó a su amigo Ovidio Sánchez, en un bable socarrón, cargado de ironía de la fina, cuando le desplazó de cabeza de lista en las elecciones, así decía: Que pese a su dilatada trayectoria en política no ha conseguido aún ganar unas elecciones. "Lleves una llarguísima carrera política y entovía non sabes lo que ye llamber unes elecciones" Pero no quedó ahí, le insiste en que se una a su equipo para "ver como 'presta'". "Fai casu de mi Ovidio, que no te engañé nunca. El final todos los sabemos, perdió las elecciones y renunció a su escaño en Madrid, como renunció a seguir apoyando el ACF, cuando vio que los aficionados de verdad del Real Oviedo le iban reviviendo, muy a su pesar.

Luego podemos seguir viendo obras que le pondrían de patitas en la calle a cualquier otro político, a usted no; porque al dejarle tantos años disponer de la poltrona, se le permitió sembrar para recoger, en este caso votos, que salen de favoritismos, amiguismos y el aflorar (igual que la maleza en el huerto) de lameculos que se pegan al poder como lapas, son incordio, pero se usan para seguir mandando.

Ahí seguirá mientras quiera, a pesar de: Villa Magdalena, Campo de Golf, Asturcón, etc. Todo un despilfarro de sobrecoste. Qué decir del palacio de congresos (obra majestuosa del arquitecto Calatrava, pero enterrada entre pisos, donde tal parece un cascaron con alguna pata asomando pero solo si te acercas mucho, de lo contrario, tendrás que imaginarlo; es como si compraras un obra de arte y la colocaras en el sótano a oscuras. Podemos seguir con proyectos que si no fuera por otros, que le quitaron la idea, fueran igual de nefastos como los anteriores, como las tres torres inclinadas, donde al estar cerca de la catedral la hubieran disipado. Qué decir del clon con que vistió todas las calles de Oviedo, con esas farolas carísimas que ni alumbran, con las mismas igual de caras jardineras y los mismos repetitivos arbolitos; y me quedan las estatuas de revoltijo, que esparció por todas las calles.

Se supo rodear de ediles, incluso algunos le superan espinosamente, y difíciles de interpretar el porqué siguen ocupando el cargo, como la concejala de aguas, la señora Isabel Pérez-Espinosa, que en su despacho se presenta como la dueña del palacete, sin tener en cuenta el principal mandato de quien ocupa un cargo público, trabajar por y para los ciudadanos, si allí acudes saldrás envuelto en una sensación de cómo no debe ser tratado nadie, jamás nadie me dejó una sensación tan humillante, simplemente por reclamar mis derechos.

¿Recuerda el cerco a Oviedo? Cuando quería todo para su ciudad y negaba cada una de las inversiones de otros bellos lugares de Asturias. No pensaba repartir la tarta, toda para usted, las ayudas, ayudas como las que usted ha tenido a degüellu; y que les negaba al resto, ¡sí!, les negaba, cuando sentía y presentía inversiones del Principado en otro municipio, en especial si era dirección a Gijón. Alguno de sus subordinados, o usted mismo, siempre mostraban disconformidad con que los trámites burocráticos se acerquen a los ciudadanos, y solo deseaban que siguiera centralizada toda la actividad administrativa en Oviedo. También fueron fuente de polémica las universidades en Mieres y Gijón, lo fue el centro cultural Niemeyer que se fue para Avilés, Feria de Muestras, etc. ¡Los demás que pintan, lo quiere todo usted!

Alguien tiene que poner freno a tanto despilfarro en los ayuntamientos, demasiados concejales, sueldos y dietas que no se justifican en el momento que vivimos. Una gran parte de ediles están jubilados o prejubilados, deben de dejar espacio a quienes están en el paro. La austeridad tiene que llevar a practicar con el ejemplo, bajarse a sí mismos, no solo sueldos y dietas, si no el número de concejalías innecesarias y eliminar toda ostentación en gastos, coches, viajes, comidas o regalos. Sr. Gabino, sea valiente y de ejemplo, en vez de criticar a quienes están intentando solucionar esta gravísima crisis, su partido llevaba meses pidiendo medidas drásticas al gobierno, ahora que las toma, no le apoyan e intentan aprovechar la situación para ganarse a pensionistas y funcionarios ¿a quién perjudicaba las medidas drásticas pedidas por su partido? No me dirá que a los ricos, verdad que lo drástico siempre es para los débiles, sean coherentes y dejen de pensarse que los ciudadanos son imbéciles.