Pequeños relatos de un candidato
Nos mostramos conmovidos ante la desgracia ajena y solidarios con quien la padece, compartimos con los que no tienen lo que podemos, lo cual calma nuestra conciencia y soluciona algo el día a día del que no tiene; pasamos el día fuera, gastando, otras veces dentro, derrochando, pero lo compensamos de vez en cuando, ahorrando; tratando de buscar con ímpetu la justicia aunque, a veces, donde sabemos que no se encuentra por temor a encontrarla sin querer y de repente, aparejada a una penitencia que nos obligue a renunciar a las bondades del universo durante un tiempo. La vida nos indica que no, pero la moral nos aconseja que sí, que es mejor que cambiemos algo fuera para que algo se mueva dentro, lo cual es lo mismo que reivindicar la protesta, incluso con mucho tiento, la contienda, para acabar con la injusticia de quien muere hambriento mientras otros viven empachados de soberbia, de que 130 camas de UCI esperen, escépticas, la llegada de 50 millones de kenianos, de que 1 respirador sea el aliento de esperanza de un millón de mozambiqueños, que un médico obre medicina con 10.000 personas o el milagro con 100.000 infelices que carecen de agua corriente, pero, aun así, es necesario oír también a quien propone que nos abonen la atención médica que precisen durante la pandemia para ser conscientes de que la esencia de alguna gente no estará nunca a la altura de un presidente.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo

