Después de la peste, el hambre y la guerra
Leo a Tucidides
Guerras del Peloponeso
Tan presentes y lejanas
Los atenienses con el virus eran recibidos
A cantazos
En Efeso
Los de Llanes ven a un madrileño
Y llaman a la Benemérita
Huimos de la quema
Mientras otros hacen caja
Venden máscaras a cincuenta euros
Eso se llama "pressura Gentium"
En el libro del Apocalipsis
Morbo de la peste y la muerte
En nuestras vidas
clamor que no cesa
suenan los compases del Dies Irae
en la distancia
Las radios satanistas
Atruenan las orejas
Disquisiciones y proclamas, aplausos en las ventanas
¿Para qué?
Solo Dios cura
Él solo salva
Oídos sordos quiero poner
A los lamentos y jeremiadas
Mas nadie se escapa
Ahora igual que hace tres mil años
Nada cambia
Y yo siento risa y piedad
Ante las parrafadas
De los culiparlantes al micrófono
¿Cuáles son los son síntomas?
Tifus, sífilis, gonorrea, bubos, fiebres amarillas y escorbuto
"Lemos" la peste
Y "limos" el hambre
Diarrea general
Colitis mental
Ardores de verano y calentura
Anosmia (el oler perderás)
Secuelas del "epi demos" (sobre el cuerpo del pueblo) que carga con las epidemias
Víctima del sensacionalismo
Muertos sin enterrar
Oráculos y plegarias
Y después de la peste la guerra y el hambre
Pero solo Dios salva
Cristo ten piedad
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