Las Parábolas de La Moncloa
En verdad, en verdad os digo: que aquellos que no vayan a ver al señor, que soy yo, a la Moncloa serán maldecidos por mi corte de fariseos. En verdad, en verdad os digo: que aquellos que vengan a la Moncloa y no acaten lo que el señor diga, que soy yo, serán igualmente maldecidos por la patulea que me sigue. En verdad, en verdad os digo: que aquellos que vengan a la Moncloa y obedezcan lo que dice el señor, que soy yo, también serán maldecidos por mi comuna en cuanto no los necesite.
En verdad o en mentira os digo: que el Gobierno y sus acérrimos entusiastas dicen que todo va bien, con respecto a esta maldita pandemia que nos ataca. Que el Gobierno no tiene, mejor dicho, no reconoce un solo error, un solo fallo. Que el Gobierno mantiene que no improvisa nada, y le molesta mucho que se lo digan. ¡Coño!, esto es imposible, no hay otro remedio que improvisar, no hay históricos que les guíen. No es un delito improvisar, ni reconocer que se improvisa, cuando las circunstancias obligan, si además este Gobierno lo está haciendo desde el primer día que llegó a la Moncloa. Incluso antes de cambiar el colchón.
En verdad y en mentira os digo: que un Gobierno al que acusan de ocultar o falsear datos no se preocupa de comprobar si es verdad y no lo saben, hay que "matar" al mensajero siempre. Que si el señor, que soy yo, estuviese ahora en la oposición no podemos ni imaginarnos lo que estaría diciendo y haciendo. Solo hay que recordar el ébola. Un Gobierno al que la oposición presta ayuda y los farsantes que le "colocaron" se la niegan. Que este Gobierno se pasa el día de tele en tele, incluso en cuarentena, de radio en radio y de periódico en periódico hablando y hablando. ¡No tienen más que hacer! Y no digan que están dando información, eso se hace en quince minutos, no hacen falta noventa. Son mítines que recuerdan el "Aló Presidente" de cierto "amigo" del Judas que tiene en el consejo.
En verdad y en mentira os digo: que el señor, que soy yo, no para de pedir unidad a la oposición. Eso sí, manda a la señora Lastra a insultar directamente sin ton ni son. ¡Lamentable esta señora, creí que era más inteligente!
En verdad, en verdad, os digo: que no se legisla en caliente, ahora toca gobernar para salir adelante, luego ya habrá pactos. No vale el "aprovechando que pasaba por aquí". Igual que están "colando" decretos que no vienen a cuento para nada, y no es eso lo que ocupa y preocupa a todo el mundo.
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