Humor en tiempos de pandemia
Con el drama de la pandemia que estamos viviendo y sufriendo en España, y puede decirse que en el mundo entero, que aunque no produce daños materiales sí se cuentan por millares los muertos en todo el mundo, más que cualquier otro fenómeno de la naturaleza. El caso es que el confinamiento no debe sumirnos en la tristeza ni angustia, mientras no nos aceche el “bicho”. Se pueden contar por cientos las personas que por graves problemas de salud, y con dolores en muchos casos, al cabo de los años pasan a estar confinados en el hospital o en su propio domicilio.
Sumario: De la necesidad de un sentido siempre necesario
Destacado: Hemos de resaltar que en algunas culturas se considera que un sentido del humor positivo es tanto el resultado como la causa de un elevado grado de sabiduría o madurez emocional
Lo que deseamos resaltar en este comentario es que debemos poner en práctica el poco o mucho sentido del humor del que nos ha dotado la vida, o que nosotros, dándole su valor, nos preocupáramos de desarrollar este sentido como una buena virtud. Sin duda, en los momentos difíciles una dosis de humor nos permitirá atravesar los malos momentos con mayor templanza. Además, tiene otra forma de acercarse a las situaciones, a las personas, a los problemas… No solo esto, sino que el despliegue del sentido del humor permite entrar de lado en los conflictos, no de frente, y protege frente al dogmatismo y la rigidez. Es verdad que ese talento y que perseverar en él puede cubrirnos de relaciones y sensaciones muy positivas.
O sea, no es, como puede parecer a simple vista, que el humor sea en el hombre una falta de seriedad o falta de chapeta. Contar chistes con más o menos gracia es solo una parte de la cualidad llamada sentido del humor. Estudios dentro del ámbito de la psicología positiva, que se definen estudios de las emociones, los estados y las instituciones positivas, según han indicado Begoña Carbelo y Eduardo Jáuregui, en un trabajo publicado hace algún tiempo en “Papeles de Psicología”. Estos autores afirman que, desde el punto de vista de la psicología positiva, el sentido del humor no es un mero remedio para prevenir o ayudar a superar la enfermedad, sino una virtud que fomenta un mayor benefactor y disfrute de la vida e incluso del crecimiento hacia una mayor humanidad y plenitud.
Hemos de resaltar que en algunas culturas se considera que un sentido del humor positivo es tanto el resultado como la causa de un elevado grado de sabiduría o madurez emocional. Y se añade que en las disciplinas místicas de Oriente, una disposición risueña se juzga como atributo de una persona altamente desarrollada. Las paradojas zen, por ejemplo, fuerzan al practicante a confrontar el absurdo para superar las limitaciones del lenguaje y el pensamiento para lograr un momento de iluminación mediante la risa. Digamos que tener actitud zen significa ser plenamente consciente del momento presente. Esto nos ayudará a liberar estrés, ansiedad, frustración e iras. Hay que concentrarse en pensamientos positivos y las acciones que te ayuden a relajarte y a responder de una forma equilibrada a los problemas cotidianos. Gracias al trabajo sobre el sentido del humor y las religiones del investigador Vassilis Saroglou, aclaremos, para terminar, que entre las 10.000 existentes en el mundo, las religiones monoteístas basadas en la ortodoxia y la fe tienden a fomentar la rigidez mental y a suprimir el humor. Sin embargo, religiones como el budismo y el taoísmo, que no requieren doctrinas o fe, y que a su vez cuestionan la experiencia ordinaria, animan a sus seguidores a pensar de formas distintas e inexploradas, lo cual las hace bastante compatibles con el humor.
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