En agradecimiento al jesuita padre Martino, asturiano de La Raya
En deuda con el padre Eutimio Martino Redondo SJ, un sabio jesuita asturiano que me enseñó a amar la literatura.
Los libros curan y salvan. El placer de leer y de saber. Seguí los consejos del padre Eutimio Martino, mi profesor de Retórica comillense
Satanás medra en la ignorancia esparciendo la oscuridad entre las masas amorfas. Así las domina. No pongamos la cabeza bajo el yugo. Desbaratemos su jugada. Soy discípulo del padre Eutimio Martino Redondo SJ y me acojo a su aristotélica proclama: "No hay en la vida mayor placer que el conocer". El diablo reina en un mundo sujeto al desconocimiento, el bulo, la mentira, los infundios, las palabras canallas. La cruz de Cristo fuente de la luz dispersó las tinieblas con su luz. Llamad y se os abrirá. Leed y se os curarán las pústulas de la peste y del gran contagio. Querido padre Martino, gracias por tus consejos, yo caminé por tu misma vereda en la creencia de que la palabra cura y salva e ilumina.
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