¿Por qué no se habla de la apertura de los bares con terraza?
Ahora que el buen tiempo va a coincidir con el desconfinamiento, los ciudadanos estamos deseando salir a la calle a pasear, a correr o a sentarnos en una terraza a tomar una caña, pero no parece claro que esto vaya a ser posible, porque no llegan casi noticias de este sector y las pocas que llegan no son precisamente muy halagüeñas.
Puedo entender que en espacios cerrados se tengan que tomar determinadas medidas para evitar el contagio, pero no entiendo por qué no se pueden abrir las terrazas de los bares, con la separación adecuada, con las medidas de higiene y de prevención necesarias y con el uso por todos de mascarillas y de guantes.
Quizás haya algo que se me escape, pero si cuando se levante el confinamiento no podemos sentarnos en una terraza echaremos mucho en falta algo tan necesario y tan nuestro como es el hecho de hacer un alto en el camino para disfrutar de un rato de reposo al aire libre, viendo cómo transcurre la vida a nuestro alrededor, sin molestar ni contagiar a nadie. Este sencillo rito forma parte de nuestra idiosincrasia y no nos lo pueden quitar, salvo que haya razones muy poderosas que nadie ha explicado todavía porque quizá no se tengan.
Ojalá que eso signifique que en poco tiempo podamos ver muchas terrazas abiertas, lo que será uno de los mejores indicios de que estamos volviendo a la normalidad. Algo tan básico y tan importante al mismo tiempo, porque puede ayudar mucho a recuperarnos psicológicamente del largo periodo de cautiverio al que hemos estado sometidos.
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