La Nueva España » Cartas de los lectores » Meditaciones desde un Oviedo confinado

Meditaciones desde un Oviedo confinado

23 de Abril del 2020 - Carlos del Fresno Marqués (Oviedo)

Oviedo desierto, vacío y lleno de esperanza, casi se puede sentir como un alma rota en sus calles desiertas, como muchos estamos y hemos sufrido ver caer a gente buena. Sus calles se han apagado y ahora duermen, en Oviedo reina el silencio. Todos queremos despertar de esta pesadilla que se ha vuelto real para dejar de ser un sueño.

Hemos visto la incompetencia de gestores sin ninguna humildad, nos enfurecen de error en error y nos quieren controlar lo mejor que tenemos, nuestra libertad de opinión.

Son aquellos que no pudieron salvar muchas vidas y se empeñan en aburrirnos con distracciones, actuando tarde y mal, los que deben ser transparentes y hacer las cosas bien.

Hemos aplaudido en las ventanas a todos aquellos que se enfrentan al enemigo invisible, gente que da todo sin saber si sus golpes serán suficientes para vencerlo, hemos perdido a seres queridos día tras día, en los que me incluyo y ni hemos podido acompañarlos en su viaje, en su último aliento de vida. Ahora la vida nos enseña que somos frágiles, que no sobra tiempo para querernos más y para vivir, sí vivir, pero vivir con la lección aprendida, nadie es más que nadie y el momento de ser feliz es ahora, no dejar lo importante para luego.

Hemos pasado de un aplauso alentador a un silencio, silencio que es de justicia por la pérdida de nuestros seres queridos.

Espero ver pronto estas calles llenas gente, del Oviedo del alma que tanto nos dio, y sentir el calor de un abrazo, y el paseo por la ciudad más bonita de España, verla recuperarse de todo el daño causado.

Que todas las víctimas que nos han dejado, víctimas con nombre y apellidos y que nunca fueron números, tengan su memoria como se merece y que los que cometieron negligencias con sus decisiones respondan por sus actos.

Que ahora que le hemos visto la cara al miedo, valoremos más lo que ahora tanto añoramos, y que la vida es simplemente maravillosa con sus cosas buenas y malas.

Que somos un gran país, con su gente, su cultura, sus costumbres; ahora todo parece desvanecerse, pero que saldremos heridos de guerra, la misma que muchos de los que ahora nos han dejado superaron, lucharon y levantaron con su esfuerzo y hoy se enfrentaron a un enemigo al que no pudieron combatir.

Hoy sabemos qué valor tienen los profesionales de la sanidad, de los cuerpos y fuerzas de seguridad, trabajadores expuestos en supermercados, farmacias, transporte... y que la gratitud por tanto esfuerzo será recordada, y para lo que presumen de revolver en la memoria del pasado ahora ya tienen la suya, está ya ha quedado escrita. Recordaremos quiénes fueron los valientes y quiénes lloraron rotos de dolor, pero también recordaremos quiénes fueron cobardes, quiénes mintieron y quiénes se reían delante de la cámara, sí lo recordaremos.

Quiero ver más profesionales ejerciendo en la política con experiencia, con humildad, no hacen falta políticos que nos cuenten más cuentos ni nos aburran con su propaganda televisiva, hace falta gente humilde, seria y responsable capaz de liderar con mano firme y conocimiento, capaz de decir la verdad y de echarse a un lado cuando no pueda, que mire a la cara a la gente y la sienta como su gran familia a la que cuidar y proteger.

España está llena de valientes, pero también de cobardes que son incapaces de apartarse y seguir sepultando a nuestra gente y exponiendo a los profesionales que luchan por sacarnos adelante con sus nefastos comportamientos.

Mi más sentido pésame a todos aquellos que han perdido a un padre, un abuelo, a un amigo... y que descansen en paz.

Que nos una la fuerza y el conocimiento para que podamos vencer y volver a una nueva vida, que sin duda lo será porque ya todos hemos cambiado.

Cartas

Número de cartas: 48976

Número de cartas en Diciembre: 99

Tribunas

Número de tribunas: 2175

Número de tribunas en Diciembre: 3

Condiciones
Enviar carta por internet

Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.

» Formulario de envío.

Enviar carta por correo convencional

Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:

Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo
Buscador