El nuevo marxismo también llega al mar
El sector pesquero tiene un grave problema. La crisis del coronavirus provocó primero una bajada de precios y ahora que los consumidores empiezan a comprar como habitualmente pues resulta que hay muy poco pescado en los caladeros y, aunque el precio del combustible hacía muchísimo tiempo que no estaba tan bajo, a los armadores no les salen las cuentas. Pues bien, el sector pesquero se ha unido a la pléyade de nuevos marxistas, esos que critican al Gobierno "socialcomunista" pero que al mismo tiempo han aborrecido del neoliberalismo, del libre mercado y la libre competencia y que, pedigüeños, piden a papá Estado que les salve el trasero. Ahora piden subvenciones y ERTE para poder amarrar la flota durante meses hasta que se recuperen los caladeros. Pero, vamos a ver, ¿quiénes han sido los que, con cientos de arrastreros faenando día y noche sin descanso, han esquilmado los caladeros? ¿Quiénes eran los que protestaban cuando la UE asignaba cuotas de pesca y siempre querían más? ¿Quiénes eran los que tiraban al mar, ya muerto, el 70 por ciento de lo que pescaban, los "descartes"? ¿Quiénes, en fin, han sido los que han arrasado los mares con su pesca industrial sin control alguno? ¿Se acuerdan ustedes de que les dije que llegaríamos a este día y que cuando llegáramos nos pedirían subvenciones, pero que entonces se iban a tener que comer sus barcos con patatas? Pues ese día ha llegado.
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