Al Arzobispado de Oviedo
Estimada Curia:
Ha llegado la hora, el momento nunca esperado, el día de demostrar que no solo os gusta recibir, sino que además no os cuesta dar.
Las parroquias de toda Asturias llevan dos meses sin ingresos, la pregunta es: ¿vais a ayudarlas o de nuevo habrán de salir adelante como buenamente puedan? ¿Vais a echarles una mano en función a las pérdidas sin esperar nada a cambio, sin llevar la cuenta ni esperar intereses? ¿Vais si quiera a devolverles el 20% de los ingresos del año pasado ya ingresados para paliar sus problemas económicos actuales?
A veces da una sensación de frialdad e inhumanidad la administración diocesana que uno se pregunta si queda algo de Evangelio entre los que llevan los dineros de la diócesis. Más si cabe cuando hay ayudas para amigos y zancadillas para los no tan amigos, cuando no se ayuda a restaurar un templo caído, pero se dilapida el dinero en templos nuevos innecesarios y por capricho.
No hay institución que trate peor a sus empleados que la diócesis de Oviedo, cuando lo menos que podía hacer era al menos ser humana con sus sacerdotes y no ponerles más zancadillas que el enemigo. Porque la prensa no se ha enterado aún, pero la administración diocesana de Oviedo gana en realidades a toda la ficción que han presentado de la diócesis de Cádiz-Ceuta.
Si el clero asturiano tuviera que votar su continuidad, poner nota o valoración al actual ecónomo diocesano, ¿qué creen que saldría? Si la nota la pusieran sus familiares, amigos y conocidos que trabajan en la librería, casa sacerdotal, Arzobispado, Seminario o Escuela de Padre Ossó igual hasta sacaba sobresaliente, ¿pero se llegaría al suficiente con el voto de los curas?
Sr. Ecónomo, ya sabemos que la vida de parroquia no le gusta, por eso ha quitado desde su llegada a la parroquia del Cerillero la misa diaria pues, claro, más importante que celebrar es contar dinero y pasearse por el centro de Oviedo. Al menos respete a los curas que sí quieren a sus parroquias y se desviven por sacarlas adelante.
Déjese de cuentos de que la diócesis no tiene dinero, que toda Asturias conoce las múltiples fundaciones que tienen, las cuales les generan cuantiosísimos beneficios.
Le digo más, no sé a qué espera a cumplir con el fin de la Fundación de Mohías, fundación que nació para ayudar al clero diocesano al final de sus días, y para más escándalo la sede de la fundación está en ruinas. La pregunta es: ¿el dinero que ingresan de ella se destina todo a los sacerdotes mayores?
¿Por qué el dinero de la Fundación de Mohías no se invierte en la casa sacerdotal para que a los sacerdotes mayores les costara lo mínimo residir en ella? ¿Como es posible que en diócesis más pobres los sacerdotes estén pagando 300 euros al mes por vivir en la casa sacerdotal y aquí paguen tanto que ni les quede para comprarse unos zapatos? No sé, a veces da la impresión que donde menos caridad hay es en la Casa de Dios.
Sr. Arzobispo, por favor, ni el clero ni el pueblo fiel de la diócesis que colaboramos en los consejos económicos parroquiales vemos normal los atropellos que diariamente lleva adelante el Sr. Ecónomo diocesano. Por favor, nombre otro o, al menos, que este cambie de actitud, pues lo que nos hizo en Salinas con la granja de don Abel no tiene nombre.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo