¿Es lo mismo fan que experto?
Hay quienes se erigen como maestros del fandom, no ya por lo que saben respecto a otros fans, sino por la forma de entender lo que un fan es. El fan sería para ellos una suerte de construcción del camino vital hacia la especialización del ocio. Sin esa continua formación especializada que ellos asumen no como pasión, sino como una especie de carrera universitaria, el fan dejaría de ser fan, no sería un fan auténtico. Algunos hasta llegan a afirmar que es algo innato (si esa pasión no surge desde pequeño, olvídate de ser de los nuestros), otros le otorgan un carácter meramente material (tengo esto, y tendré esto otro en mi colección; y si tú no lo tienes, no eres fan de verdad); y luego están quienes ven en el individualismo una definición del fan (si solo te gusta cuando gusta a todo el mundo, cuando está de moda, ni eres fan-fan; la socialización como enemiga del hobby). Dichas concepciones del fan no hacen más que alimentar recelo y clasismo, más que plantar la necesidad de aumentar el conocimiento o la pasión.
Por un lado, el fan es un potencial experto, un buscador de conocimiento. Tiene la predisposición por construirse como experto a través de una pasión que alimenta su curiosidad.
Por otro lado, el fan es admirador, siente una fe ciega, es un fanático. La racionalidad y las razones quedan sumidas en la necesidad de ser devoto en sí, de rezar. Decía Aizen Ssuke, del manga Bleach, que la admiración es el sentimiento más alejado de la comprensión. Quien se maravilla con la naturaleza suspende la necesidad de descubrir por admirar. Luego el fan es un curioso irrefrenable o un devoto irracional; es contemplación o admiración; o ambas cosas.
Lo que está claro es que ser fan implica algo de curiosidad y algo de devoción, como poco. ¿Cuánto? Me temo que se mide con el tiempo, no con lo material, y para y por uno mismo.
Nadie es lo suficientemente fan de otra persona como para poder medir su tiempo dedicado. Ningún fan es desdeñable porque hablamos de la dedicación a un hobby, y la vida tiene de media 80 años... Unos preferirán construir el templo del fan y otros solo rezarán en el templo. Y otros tantos construirán y rezarán. Qué hacer con el tiempo que se nos ha dado hace al fan.
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