El ejercicio físico después del coronavirus
Una de las cosas positivas que dejará la pandemia es que ha generado la necesidad de practicar algún tipo de ejercicio físico en muchas personas muy poco habituadas a ello. Para romper la rutina y la de tantos días de confinamiento habrá quienes se hayan animado a hacer gimnasia, pilates, yoga, bicicleta estática, o a caminar en circuitos domésticos improvisados, algo muy positivo tanto en el aspecto propiamente físico como en el psicológico, por lo que haya podido servir de ayuda y de estímulo para pasar mejor las interminables horas de inactividad.
Es probable que cuando podamos movernos libremente habrá quienes vuelvan a marginar el ejercicio físico, pero otro muchos seguirán haciéndolo porque ya formará parte de sus vidas, como comer, trabajar, o relacionarse socialmente. Posiblemente habrán descubierto que no hay mejor medicina para el cuerpo y para el espíritu, que no es necesario batir ningún récord de velocidad ni jugar en la NBA para sentirse deportistas, porque dar cien vueltas diarias a una terraza de tres metros de largo y hacer un curso completo de yoga online durante este periodo tiene muchísimo mérito y puede significar haber descubierto un nuevo mundo a través del deporte doméstico practicado como consecuencia del encierro al que hemos estado sometidos durante tanto tiempo.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo

