Las devoluciones de Hacienda
Cada vez que veo en la tele, escucho en la radio, o leo en la prensa que Hacienda ya devolvió equis millones a miles de contribuyentes por retenciones superiores a su cuota anual correspondiente en el IRPF, les prometo, que se me ocurre jurar hasta en arameo, pero desconozco esa lengua, si no lo haría.
Resulta que yo, soy uno de los muchos miles de españoles que en los años sesenta del pasado siglo emigraron a Alemania en busca del falso "El Dorado" que ciertos cantamañanas pregonaban aquí entonces. Aquella decisión me costó pasarme en ese frío país doce años, con sus duros inviernos y sus tristes y melancólicas Navidades, amén de otras muchas amarguras que no viene a cuento exponer. Dado que Alemania tiene un sistema de pensiones distinto al nuestro, cuando aquí llegue a la edad de jubilación reglamentaria, además de la pensión de nuestra Seguridad Social se me informó de que tenía derecho a una pequeña pensión de Alemania por los años allí cotizados; empecé a percibirla, y cuando al año siguiente la incorporé a mi declaración (no como tanto "listo" que se hizo el sueco y hasta que en el 2013 no les llamó Hacienda a pasar por caja nunca habían declarado dicho tipo de pensiones) pues resulta que me salía una cuota a pagar que desajustaba mis cuentas. Entonces tomé la decisión de solicitar un tipo de retención mensual voluntario tres puntos superior al que correspondía al volumen anual de mi pensión en España. Consecuencia de esto, cada año al hacer la declaración, me salía una pequeña cantidad a devolver, por haberme adelantado al pago de mis impuestos durante todo un año, en porcentaje superior al que en realidad me correspondía.
Desde hace años, y saliéndome en cierto modo del grupo de los que dejan para el último día sus obligaciones con el Fisco, tengo por costumbre descargar por internet el borrador de mi declaración y modificarlo, agregando mi pequeña pensión de Alemania, que no figura en el mismo, justo el día en que empieza la campaña de Renta Web (este año, a las cero horas del 1 de abril). Estoy escribiendo esta "carta-queja" a 17 de mayo, y de mi devolución correspondiente aún no he visto ni un céntimo.
Yo pregunto: ¿es que Hacienda premia a los malos contribuyentes y castiga a quienes tratan de cumplir con sus obligaciones fiscales desde el primer día, o qué pasa?
A la vista de todo esto, pondré en práctica el dicho popular que dice: "Santo Tomás, una y nada más". Antes de finalizar el año, me plantaré en las oficinas de la Seguridad Social de Gijón y renunciaré a mi tipo de retención voluntario, a Hacienda nunca más le adelantaré un solo céntimo de mis obligaciones fiscales. Visto lo visto, llego a la conclusión de que premian al pillo en detrimento del contribuyente honrado y cumplidor con sus obligaciones fiscales. Siento ser tan duro, pero a esa negativa conclusión me han llevado.
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