Desde el corazón de Cudillero
Estimado presidente del Gobierno, señor Rodríguez Zapatero:
No sé por cuántas manos tendrá que pasar esta carta hasta llegar a usted. Sólo le pido a quien la lea que lo único que pretendo es lanzar una bengala desesperada de un gran barco, de enviar un S.O.S. de todo un pueblo que se hunde si nadie pone remedio: Cudillero.
En el año 2003 tuvimos el placer de recibir vuestra visita. Conoció nuestro puerto y nuestros barcos, a la vez que pudo contemplar nuestro bonito pueblo tan admirado por todos los turistas. Dentro de esas casas colgadas en la roca viven familias, dedicadas durante toda su vida a la pesca. Cudillero siempre se ha dedicado a la pesca de la merluza, de forma artesanal, pincho o lo que es lo mismo con anzuelo, y durante todo el año ha sido nuestra manera de subsistir.
Hace 2 meses nos sorprendió la noticia del cupo de la xarda, afectándonos a un gran número de embarcaciones. Ahora nos atacan con el TAC de la merluza impidiendo su pesca en lo que resta del año.
Nuestro ritmo de trabajo no tiene calendario. Está marcado por las condiciones meteorológicas. Debido a esto nos pasamos una media de 3 meses sin poder salir a faenar. Durante ese tiempo se mantienen los gastos obligatorios (Seguridad Social, seguro, gasóleo, hipoteca, estudios, etcétera). Ahora llega el buen tiempo y no nos dejan trabajar.
Qué bonita es la mar enfurecida para los que no viven de ella. Qué sufrimiento padecen los marineros cuando la ven, rogándola que se calme para poder salir.
¡Qué fácil es poner tasas o cupos para los que tienen una nómina al final de cada mes! ¡Qué fácil es negociar con la vida de los ajenos sin que ellos puedan exponer sus opiniones! ¡Qué sencillo decir ahora puedes pescar, ahora no! ¡De qué vamos a vivir!
Señor Zapatero, sé que los tiempos son difíciles. Que todos tenemos que apretarnos el cinturón. Pero a nosotros nos ahogan de tanto apretar. Nuestra mar siempre estuvo delante de nosotros esperando a que el marinero saliese a pescar, dejando muchas veces la vida en ello.
Piense no sólo en este bonito pueblo. Piense en todos los marineros y pueblos pesqueros, cuya vida depende única y exclusivamente del fruto de la mar.
Espero que comprenda nuestro sufrimiento y nuestra desolación.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo