Ánimos para Casa Puyo
Uno de los restaurantes más emblemáticos de Asturias, situado a orillas del Nalón, es un lugar precioso donde muchas familias se reúnen los fines de semana para degustar los platos preparados por Carmina, Marili, Maruchi, Lili y Reyes.
Es un lugar en el que uno se encuentra muy a gusto por su sencillez, por el trato personalizado que dan a los clientes, que te hacen sentir como en casa y porque uno se da cuenta de que en esta gente hay mucho más que una buena cocina.
Tuve la ocasión de comer muchas veces allí y recuerdo siempre el saludo en la misma cocina, abriendo las tarteras del "Desarme", unos garbanzos con bacalao que olían estupendamente desde la entrada. Detrás de la barra siempre estaba Casimiro (q.e.p.d.), dando la bienvenida y poniendo el primer vino.
La bienvenida, dependía del día. Unas veces algo más locuaz, pero casi siempre de pocas palabras, invitaba a que fueran ellas las que recibieran a los comensales.
Enseguida aparecía Marili con su particular: "¿Qué tal, vida? Dando un par de besos e invitando a pasar a la cocina, no mucho más tarde veía a Maruchi con el saludo parecido y, una vez en la cocina estaba Carmina, la dueña y Lili, su hija, ultimando el requemado del arroz con leche más rico de Asturias. Siempre con palabras amables, cariñosas y positivas hacia el que entraba.
La comida, siempre excelente, desde les fabes con almejes, a los repollos rellenos, las manos de cerdo, la carme gobernada, las croquetas de bacalao hasta los cachopos de carne y de merluza, está todo riquísimo. En el Antroxu nos ponían un pote con nabos y patatas, con repollo y berza picada que era un espectáculo. A los postres siempre nos dejaron echar un cantarín, o varios y a media tarde pasaban unas bandejinas de embutido, por si alguien quedaba con hambre, cosa que nunca se dio.
Hace unos días, leía en el periódico la inundación que tuvieron en la zona, quedando muy afectado el restaurante. Afortunadamente solo daños materiales y vino a mi memoria todas las veces que había estado allí, lo agradable del sitio y desus laboriosas y buenas personas. Por eso desde aquí quiero enviarles las gracias por el trato recibido siempre y los mejores ánimos para que muy pronto pueda estar abierto de nuevo y podamos seguir disfrutando de uno de los mejores restaurantes de Asturias.
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