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IA, macrodatos y pequeñas cosas (I)

15 de Octubre del 2020 - Carlos Muñiz Cueto (Gijón)

Asturias debe embarcarse en una batería de proyectos sin igual. No porque vaya a ser posible su financiación con ayudas de la UE, sino porque serían sus proyectos de futuro. Un futuro digital para conseguir: industria alimentaria ecológica, energía verde y limpia, y cambios sociales. Seguramente recibirá ayuda para ellos de Europa, pero no debe esperar. Las empresas deben ponerse a ello realizando investigaciones y pruebas de desarrollo con las que presentar ante Europa proyectos y realizaciones que ya se hubiesen comenzado a ejecutar: la construcción de futuro es imprescindible, ayude Europa o no.

1.- Primer proyecto - Lo primero es fomentar la preparación para el uso de la Inteligencia Artificial que está al caer (puede que sea "robot todai" de Noriko Arai o puede que sea otra, pero la enseñanza de matemáticas y el discernimiento de la lectura serán primordiales). Una IA que será, sobre todo, capaz de: aprender, valorar, y hacer las cosas mejor que la mayoría de nosotros, tomando decisiones más rápido. El caso es que la IA necesitaría datos para según que asuntos realizar.

1.1- El primer encargo sería tener bajo su control toda la fauna salvaje y toda la fauna doméstica, incluso todo animal que se mueva, así como la situación de cultivos, bosques, e invernaderos.

1.1.1.- Para ello, en primer lugar, será necesario extender un cable de comunicaciones (o de internet) en paralelo con todos los cables de transporte de la electricidad, llegando a todas las casas.

1.1.2.- En alguno de esos postes de la luz (después postes de comunicaciones de internet) se colocaría una cámara capaz de captar la imagen térmica de cualquier animal (que siempre la IA identificaría de alguna manera: tanto si portase un chip nanotecnológico a modo de código, como si no lo portase). Este tipo de cámaras o sensores capaces de captar la presencia de fauna (salvaje y doméstica) para situarla, estarían profusamente instaladas en otras partes, así como también en robots móviles auxiliares agropecuarios. Por cierto, cada poste iría con una placa solar en su parte superior y, como en las cimas de las montañas de los valles habrá instalados aerogeneradores, algunas torres dispondrían también de dichas cámaras. Las cámaras no solo situarían la localización de las señales térmicas de la fauna circundante o de identificación de los códigos de sus chips detectores, también darían mucha información adicional como temperatura, presión atmosférica, viento... O alertas de incendio.

1.1.3.- Habrá asociaciones de cazadores sin muerte, provistos de rifles que dispararían dardos anestésicos, que cazarían los animales y por medio de un dispositivo insertarían en las piezas anestesiadas un chip nanotecnológico. De tal forma que, el propio calor animal, en su diferencia con el exterior de la piel, mantendría su energía activa y por tanto detectable a gran distancia. El chip emitiría un código que la propia escopeta habría transmitido al sistema por medio de una especie de móvil incorporado a ella. Así el sistema iría añadiendo toda la información que se vaya confeccionando (en relación a ese código) sobre la vida del animal. De suyo, esa primera información partiría del cazador (o más bien de la escopeta que ya la habría enviado a la IA) adjudicándose la pieza al cazador y añadiendo todo lo que este comunicase al sistema a través de ese intercomunicador auxiliar en que se habría convertido la escopeta.

1.2.- Con toda esta información, las posibilidades de que la IA identifique conductas y anticipe problemas en la fauna salvaje o doméstica, serían muy grandes en función de las mentes matemáticas que hubieran sabido programar las aplicaciones del comportamiento de una ganadería extensiva, o de una agricultura ecológica, o de una protección de nuestros bosques. Siempre en colaboración con los robots o partes móviles de que dispondría la IA: robots tipo araña, tipo mariposa, multirruedas, o drones, o robots que simulen a un perro.

Solo es una historia o una primera parte de la batería de proyectos que los emprendedores pueden ir pensando: ¿Cómo extender el cable de conexión de internet? ¿Cómo diseñar un poste con placa solar capaz de portar una cámara aunque no porte cables? ¿Cómo atravesar bosques o por donde la visión de cables no sería adecuada al paisaje, debiendo los cables entubarse por el subsuelo? En donde también se colocarían sensores para obtener, aunque solo sea eso, la temperatura y humedad de la tierra. ¿Qué maquinaria podría hacer esa entubación bajo el subsuelo sin tener que cavar a través del bosque? Los emprendedores podrían ir pensando y disponiendo: ¿Qué chips podrían ser insertados bajo la piel de los animales para que fuesen detectados a larga distancia por las cámaras y los visores? ¿Cómo deberían ser esas cámaras y visores así como otros sensores? ¿Cómo debería ser la escopeta de dardos anestésicos con intercomunicador con el sistema? Por no hablar de cómo podrían ser los robots que ayuden a: la ganadería extensiva, los cultivos ecológicos, y a la selvicultura autóctona para obtener madera noble.

¿Proyectos de futuro para Asturias? Hay que empezar por las cosas pequeñas como los sensores que los pudieran hacer posibles. Porque, si otros países suministran esas pequeñas cosas, colonizarían los proyectos de Asturias y seguiríamos en la ignorancia presente y futura.

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