Recobren la sensatez
No sé si alguna vez los dirigentes españoles, especialmente los políticos y los creadores de opinión, fueron sensatos, pero está claro que actualmente el grado de insensatez que muestran algunos es muy inquietante. Nos enfrentamos a una segunda fase de la pandemia que parece más agresiva que la primera y hay tres elementos principales que pugnan en su importancia a la vista de las posiciones públicas que mantienen nuestros dirigentes, después de la última propuesta del estado de alarma que el Gobierno ha llevado a las Cortes, donde se les da a las comunidades autónomas un protagonismo que es motivo de controversia, cómo no: el primero, hay que fortalecer y proteger nuestra sanidad pública, la única capaz de salvarnos frente al covid-19; el segundo, hay que evitar que la economía se hunda definitivamente; el tercero, hay que minimizar el "destrozo emocional" que para algunos españoles puede suponer celebrar las fiestas de Navidad con restricciones, e incluso el peligro que corre la celebración de la Semana Santa en su faceta turística y folclórica. Un primer paso, a modo de sugerencia, para recobrar la sensatez sería no poner en un plano de igualdad, como están haciendo irresponsablemente algunos, los tres elementos citados, porque evidentemente no lo son. Asimismo, recordarles que el único elemento que tiene capacidad de influir de manera fundamental y positiva sobre los otros dos, es el de fortalecer la sanidad pública protegiendo a los sanitarios, dotándoles de los medios y condiciones necesarias para su trabajo.
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