Barbón y quién escupe más lejos
Todos estamos ya cansados de tanta medida, de tantos apretones de cinturones en los que ya agotamos los agujeros, de tantas broncas como nos caen llamándonos irresponsables. Estoy harta de esa palabra que tanto nos dicen nuestros "queridísimos" políticos y, lo peor, nuestros vecinos, gente de la calle y nosotros mismos, de tal manera que ya hasta nos lo creemos.
Es cierto que mientras no haya vacuna eficaz tendremos que convivir con el bicho, queramos o no, no va a desaparecer, solo lo podemos controlar para que los contagios no se desmadren. De repente todos los políticos parece ser que están asustados por la llegada de la segunda ola, y quiero recordar que ya en mayo nos avisaron de que para el otoño llegaría, y mientras no haya vacuna llegará una tercera, cuarta y las que haga falta.
Cuando la crisis inmobiliaria, entre el 2008 y 2014, recuerdo que al llegar a una notaría y saludar a la chica de recepción esta me dijo: "Mientras haya salud", a lo que seguidamente rectificó: "No, mientras haya trabajo, porque el trabajo da dinero, si no tengo dinero no tengo salud porque cómo puedo pagar mis tratamientos, rehabilitaciones, etcétera, pero si tengo trabajo puedo permitirme recuperarme mejor", y ya de aquella me dio qué pensar. Eso no quita que la salud debiera estar por encima de todo, no cabe duda, pero si tenemos que decidir entre morirnos de coronavirus o de hambre, frío y demás... no sé. Creo que se debería compaginar salud y economía.
¿Por qué digo esto? Porque a mí Barbón siempre me gustó, me parecía una persona seria, que tenía las ideas claras y que estaba dispuesto a hacer todo lo indecible para salvaguardar la salud de los asturianos, pero resulta que al final me encuentro que (dicho totalmente desde el cariño y sin querer herir los sentimientos de nadie aunque sea una grosería) estaba jugando a ver quién la tenía más larga o quién escupía más lejos.
Como esta ciudadanía que no es tan irresponsable como nos dicen, porque los botellones, la gente que no lleva mascarilla y demás irresponsables son mínimos, acató el día 4 de noviembre los cierres de negocios, sin entender muy bien por qué, pero por solidaridad y responsabilidad, lo que quedó bien claro es que los irresponsables que están acabando con nuestra paciencia y economía son los propios políticos que desde mayo de este año ya sabían que habría una segunda ola, no tenían nada preparado y podían haber utilizado el verano para marcarse unas pautas de incidencia del covid-19 para efectuar restricciones y haber previsto unas medidas económicas si llegaba el caso, para que los negocios que tienen empleados y los que son solo autónomos no se fueran para casa con las manos vacías pero teniendo que pagar Seguridad Social, alquileres, tributos a la hacienda pública, y demás, vía ERTE como los de marzo, cese de actividad o similares. Y unas medidas sanitarias; no tener 3.000 camas y no tener personal sanitario, una vergüenza. Con esto Barbón, todos los políticos dejáis claro lo que os importa: vuestra imagen, vuestra poltrona, vuestra cartera caliente trabajéis o no trabajéis. Ante esto, ¿todavía seguís apelando a nuestra responsabilidad? ¿Quiénes son los irresponsables? Tenemos que seguir siendo responsables por nuestro propio beneficio, pero, jolín, dad ejemplo vosotros también, que para eso se os votó.
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