Apoyo al pequeño comercio
Como casi siempre, hago uso de este espacio para tratar de exteriorizar y compartir mi frustración y enfado por alguna de las situaciones que nos ha tocado vivir. Ya saben, “el derecho a la pataleta...”. Desgraciadamente, en muchas ocasiones, es lo único que nos queda.
En esta ocasión, el tirón de orejas es para muchos de nosotros. Se ha insistido mucho sobre la responsabilidad individual en tiempos de pandemia, y así debería ser. Sin embargo, he observado cómo muchos de nosotros hacemos caso omiso de las indicaciones de las autoridades sanitarias, de forma reiterada, y completamente consciente. Y, en esta ocasión, no se trata de adolescentes. Son muchos los que, aprovechando el buen tiempo, se reúnen con familiares y amigos no convivientes en áreas recreativas y parques. Una cosa es dar un paseo con mascarilla y distancia de seguridad, y otra muy distinta celebrar “el martes de campo” sin apenas medidas de protección. No quiero pensar en lo que sucederá en muchos domicilios puertas adentro.
No deberíamos celebrar ningún tipo de reunión con no convivientes cuando ello suponga tener que quitarse la mascarilla (para comer o fumar, por ejemplo) y no guardar la distancia de seguridad. Desde aquí insto a las autoridades competentes para que lo tomen en consideración.
Teniendo en cuenta lo expuesto anteriormente, ¿es necesario tener cerrado el pequeño comercio? No puedo comprarme un pantalón, pero quedamos para comer con abuelos, tíos, primos y amigos cuando nos apetece. ¿Realmente tiene sentido?...
El pequeño comercio lleva cerrado muchos días y los contagios siguen aumentando. Los dueños de esos comercios tienen familia y empleados que ven peligrar sus puestos de trabajo. La mayoría del pequeño comercio respeta de forma escrupulosa los protocolos de seguridad y me atrevería a decir que los contagios en sus locales son prácticamente nulos. Pensemos en toda esa gente, en sus familias y empleados. Si continuamos así, su sacrificio será inútil. Seamos responsables. Dejemos a nuestros dirigentes sin argumentos para mantener cerrado el pequeño comercio. Que la “culpa” sea de “ellos” y no nuestra.
A todos los propietarios y empleados del pequeño comercio, deciros que os echamos mucho de menos. Que las calles no son las mismas sin vuestra sonrisa y sacrificio diario. Que se me encoge el alma al ver vuestros locales vacíos, sin vida. Mucho ánimo y confianza en la responsabilidad de todos.
Desde el mayor de los respetos, le pediría al Sr. Barbón y su equipo que salieran a la calle. Paseen, en este caso, por las calles de Oviedo y observen dónde están los problemas. De este modo, podrán evitar sangrías innecesarias y más “palos de ciego”. Sé que la tarea es sumamente complicada, pero quiero confiar, necesito confiar, en que nuestro Presidente está asesorado por los mejores profesionales y que, al menos, en esta ocasión, dará prioridad absoluta al interés de todos los asturianos frente a los intereses políticos.
Mucho ánimo para todos.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo