Algo más que covid-19
Sin ánimo de ser exhaustivo, intentaré hacer un resumen del año transcurrido desde las últimas elecciones generales de España.
El candidato del PSOE prometió a los españoles en todos sus actos electorales que jamás llegaría a acuerdos con Unidas Podemos, con separatistas como ERC o con los herederos de la banda terrorista ETA. (Ahí están las hemerotecas y las videotecas para confirmarlo).
A pesar de esa promesa, el PSOE forma Gobierno con Unidas Podemos, cediéndole una Vicepresidencia y varios ministerios. El vicepresidente segundo del Gobierno, del partido de Unidas Podemos, ridiculiza, zahiere, humilla y menosprecia al jefe del Estado siempre que tiene la ocasión.
Un apoyo para la investidura y la acción de gobierno lo está obteniendo de ERC, que ha protagonizado un golpe de Estado (no un intento como intentan hacer creer algunos medios de comunicación, sino un golpe de Estado, fallido, pero golpe de Estado).
Otro apoyo para la investidura y para la acción de gobierno lo recibe de Bildu, partido claramente favorable a ETA y que homenajea a los asesinos al regresar a sus pueblos, tras cumplir las condenas impuestas. Recordar que hay más de 300 asesinatos sin resolver, y de los que se desconoce la identidad de sus inductores y autores. ¿Dónde pueden estar esos terroristas?
El Gobierno ha intentado poner en marcha una ley para poder nombrar directamente a los jueces. Solo la amenaza de la UE de paralizar la entrega de las ayudas comprometidas para paliar los efectos de la crisis económica si se llevase a cabo dicho proyecto ha frenado la tramitación. Es posible que, una vez recibidos los 140.000 millones de euros prometidos, vuelvan a intentar sacar adelante la ley.
El Ejecutivo, por boca del general de la Guardia Civil Santiago Marín, en una comparecencia en abril, reconoció que se espiaba y se censuraban las noticias desfavorables al Gobierno. Ante el escándalo provocado por dichas declaraciones por su ilegalidad, el Gobierno, tras negarlo reiteradamente, está preparando una ley que dé cobertura legal a dicho propósito.
Para conseguir la aprobación del Presupuesto por parte de los independentistas de ERC, el Gobierno desarrolla una ley que elimina el español como lengua vehicular en aquellas comunidades que así lo soliciten. (Esta ley de educación por su partidismo y sectarismo merece un comentario monográfico).
Por el mismo motivo, por las presiones de Bildu, está acercando presos de ETA al País Vasco aunque no muestren arrepentimiento a sus criminales actos.
El Gobierno, a través de sus diferentes portavoces, insiste en que hay que pasar página del terrorismo de ETA y del golpe de Estado de los independentistas catalanes por ser cosa del pasado, pero por otra parte no cesa de recordar una y otra vez los hechos acaecidos hace 80 años, a Franco, a sus crímenes, a la Guerra Civil, tramitando una ley de memoria democrática por la que podrá multarse e incluso encarcelarse al que a juicio del legislador cometa apologismo de aquellos años.
En estos meses, el Gobierno ha tomado el control de organismos del Estado, como RTVE, CIS y la Fiscalía General del Estado, adscribiéndolos a sus políticas gubernamentales.
Los partidos que sustentan al Gobierno, apoyados por determinados medios de comunicación, acusan a la derecha de crispar la situación política, pero a los que matan por lucir símbolos nacionales, a los que apedrean en los mítines y a los que asaltan los locales de los negocios familiares es precisamente a los miembros de esa derecha crispadora y antidemocrática.
Por todo ello, quiero mostrar mi repulsa a todo lo que está pasando y remedando a la “portavoza” de ERC que afirmó en sede parlamentaria que la gobernabilidad de España le importa un comino, a mí me importa un comino que me llamen fascista, provocador e incluso, como dice Echenique, que me acusen de arrastrar el nombre de España por el estiércol, y grito con fuerza una y otra vez: ¡Viva el Rey! ¡Viva España!
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo

