Reflexiones sin pedradas 002
2.- Iglesia... Realidad - Cultura - Misterio - Verdad - Dios - Hombre -- ¿? ¿? ¿?
Rodeados e inmersos en una fe, regalo de “Aquel” que conoció la angustia del hombre, dio sentido a su realidad y bautizó de esperanza su vida..., caminamos, pensamos y reflexionamos...
Observamos la inmensa capacidad de adaptación temporera de la Iglesia, como Institución..., observamos la burocratización de su fe, de su caridad..., observamos la mortandad acelerada del Dios de sus Evangelios.
Hoy, contactar con las burocracias obispales es como llamar a las oficinas administrativas, en las que los formulismos son más importantes que los principios, en este caso religiosos.
Hoy, la caridad se publica, contradiciendo el mandato evangélico: “Que tu mano derecha no sepa lo que hace la izquierda”. Folletos, revistas, hojas parroquiales, anuncios, encuestas, justificantes...
Hoy, la caridad se publica cuando las colas para recoger alimentos se convierten en caminos silenciosos y humillantes en las aceras públicas, sin respetar el derecho a la intimidad.
¿Para qué están los salones parroquiales? ¿Dónde el espacio acogedor de la iglesia?... Parece gustar más el espectáculo del hambre y de la mano tendida con signos de caridad.
Hoy, acercarse con sencillez al Señor, en visitas personales es cada vez más difícil, las iglesias están cerradas.
Todo debe hacerse telemáticamente, eso si tienes cobertura.
Ahora, cuando se pasa por delante de una iglesia, el comentario general es “¡Qué pena!, ¿No podrían solucionarlo?”.
Hoy, la liturgia semanal obligatoria y castigada con pecado mortal, hoy, siglo XXI, la Iglesia burócrata no es capaz de adaptarse a las necesidades de los fieles: dos misas para 20.000 fieles, los que no quepan a confesarse por no ir a la liturgia.
Hoy, la capacidad que toda sociedad e institución ha tenido para adaptarse al devenir del tiempo... Hoy, la Iglesia: no sabe..., no puede..., ya veremos..., no es tan fácil...
Claro, eso necesitaría dinero para trabajar más, para orar más, para escuchar más..., pero, parece ser que se contraviene las normativas sindicales.
Hoy, los acuerdos con los organismos oficiales se utilizan para llevar a cabo muchas inversiones..., eso trae consigo adaptarse y dejar fuera el látigo que Jesús, evangélico, utilizó en aquel templo, ya entonces farisaico.
¿Esto es, hoy, la fe de los mártires, ¿la fe de los que padecen persecución, la fe de los que, en su sencillez, se privan de todo?
Adaptarse o morir, parece ser que es mejor o por lo menos más rentable (¿?)
Siempre me ha sobrecogido la fe de esos hombres y mujeres cuyo tiempo estaba lleno de caridad y cuando su cuerpo ya no podía más, en silencio, se recogían, sin pasar por la prensa para que los conocieran...
Escribo estas cosillas porque la conciencia se revuelve contra la propia cobardía, al guardar silencio y más silencio, ante tantas deformaciones religiosas.
No debemos olvidar que Roma ya no domina el mundo... El mundo será dominado solamente por la verdad, por la caridad desconocida y por la fidelidad a los principios personales y sociales… pero para eso hace falta ser valientes.
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