Tonto el que llegue el último
Previendo que no va a haber vacunas para todo el mundo como es de esperar por la nefasta gestión de un Gobierno de inútiles y caraduras, los que pueden saltan el protocolo para vacunarse, es decir, se cuelan en la fila y esos son políticos o altos cargos de la Administración que están debajo del peral y se han lanzado a coger sitio no vaya ser que el bicho asesino los coja en la espera de su turno; además como ven la lentitud de vacunación y los distintos tipos de vacuna no muy fiables que te pueden clavar sin tu consentimiento y creyendo que esta primera de Pfizer es la mejor pierden el culo para ponérsela lo más pronto posible. Observan que faltan jeringuillas, no llegan las vacunas prometidas, de un vial se sacan 6 dosis o las que sean para que el paciente tras el pinchazo se vaya para casa contento y convencido de que ya está salvado, se han puesto la primera dosis más de un millón y de la segunda solo 62.000 y falta la segunda, que debía llegar a los veinte días y no han llegado, ante tal despropósito como es costumbre en la España de Pepe Gotera y Otilio. Por tanto, se han lanzado a vacunarse lo más pronto posible, así que el que llegue más tarde es tonto pudiendo vacunarse, ya que el pueblo no puede y le tocan todas las pedradas posibles. Parece ser que va haber vacuna durante mucho tiempo, además parece ser que solo inmuniza por seis meses y cada seis meses hay que reforzarla con otro pinchazo llenando el cuerpo de química nociva que las personas mayores en organismos viejos puede traer serias consecuencias, en todo caso de que se pueda reforzar y no falten las dosis necesarias y sin ese reforzamiento observa que el cuerpo está mucho más expuesto al ataque del virus, cosas veredes que seguro os asustares. ¡Que Dios nos proteja!
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