Covid-19 y los supercontagiadores
El uso y abuso diario de los protagonistas y actores secundarios de esta serie de ciencia ficción que, desde hace un año, interactúa y condiciona nuestras vidas ha hecho que los consideremos parte de la familia; la parte mal avenida, sí, pero de la familia.
La familiaridad ha llegado a tal punto que hemos relativizado preocupaciones y miedos que veníamos padeciendo, en la creencia de que el maná de la vacuna sería el efecto desterrador de esta pandemia y nos habíamos relajado y hasta divertido con las últimas, que no definitivas, gilipolleces de Pablo Iglesias y señora.
Repartidos los papeles, cada cual iba ejecutando el suyo con más o menos acierto, profesionalidad y conocimiento (lamentables Illa, Simón y el Presidente), hasta que apareció un nuevo personaje inédito desde el comienzo de la serie, extra inesperado, para poner un poco de morbo y angustia y complicar el final que todos preveíamos feliz.
La escena se desarrolla en el barrio bilbaíno de Santutxu, donde un brote de coronavirus diezma el portal número 4 de Plaza de Haro, donde viven 62 familias, produciendo la muerte de seis vecinos, no menos de treinta positivos y varios hospitalizados.
Inquietud y confusión en el patio de butacas intuyendo una sesión interminable, a pesar de que Sánchez nos había prometido el final para el próximo verano (“inmunidad de rebaño”), y desasosiego en los más impresionables por conocer al responsable ejecutor.
La pista principal la proporciona una microbióloga que apunta a la tesis del “supercontagiador”, que, lejos de ser un superhéroe de Marvel, no es más (ni menos) que un individuo mayor, infectado por covid-19 y obeso, tres características que, según investigadores americanos, se correlacionan con la propensión a exhalar más gotitas respiratorias, que son los principales propagadores del SARS-CoV-2, el virus que causa el covid-19.
El supercontagiador (se calcula que el 20% lo son) produce una importante carga viral cuando se infecta, lo que, añadido a un deficiente uso de la mascarilla, limpieza de manos, distancia social, espacios pequeños y cerrados, genera una alta probabilidad de contagio.
En esta coproducción OMS-Gobiernos-Farmacéuticas, subvencionada por todos los ciudadanos y protagonizada por televisiones, epidemiólogos, ministros, periodistas y comisionistas, los directores de la serie adelantan que en momentos clave, cuando el interés de la epidemia decaiga, habrá nuevas sorpresas en el reparto, con la incorporación de inesperados “villanos” para subir tanto el interés de la serie en las próximas temporadas como los pingües beneficios que viene reportando a sus promotores.
Finalizo con una recomendación: como todo apunta a que la transmisión de Santutxu ha tenido lugar en los ascensores, fundamentalmente a través de los aerosoles, por las gotitas que se quedan suspendidas cuando respiramos, nada mejor que desinfectar el ascensor diariamente, abrir las puertas durante unos minutos para facilitar su ventilación y, en la medida de lo posible, no compartirlo con otra persona. Que Dios nos proteja.
Saludos cordiales.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo