Yo ya a mi edad...
El paso del tiempo no tiene por qué significar necesariamente un deterioro de la persona, sino más bien al contrario, sobre todo en lo relativo a la capacidad intelectual que tenemos y que si se trabaja solo puede tener el límite que nos propongamos.
Es muy frecuente escuchar la expresión "Yo ya a mi edad...", cuando es precisamente la edad la que proporciona experiencia y conocimiento, y a medida que se cumplen años es cuando más vamos aprendiendo y aprehendiendo, porque el horizonte del aprendizaje es infinito, la vida es muy corta y si nos abandonamos mentalmente antes de tiempo estaremos tirando piedras sobre nuestro desarrollo cognitivo, que no tiene fronteras ni entiende de edades.
Hay que ser positivos, en cualquier circunstancia, y tener muy claro que la mente se rejuvenece con el paso del tiempo, si lo sabemos y lo queremos aprovechar, y si vivimos con ilusión, con esperanza y también, por qué no decirlo, con imaginación, algo muy necesario.
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