En defensa del profesorado del IES Pérez de Ayala

En las últimas semanas su periódico se ha hecho eco de las concentraciones que organiza la Asociación de Madres y Padres del Alumnado (AMPA) pidiendo la presencialidad total en la atención educativa al alumnado, y a las que se suma profesorado del instituto.

En la crónica escrita de la concentración del pasado miércoles 24, se recogen las declaraciones de un "portavoz de los profesores" relativas a la seguridad en el centro, al estado de ánimo del profesorado, a la formación en "nuevas tecnologías" y al equipamiento informático del que dispone el alumnado del centro.

No siendo la primera vez que aparecen esas opiniones, como director, y por tanto representante, del IES Pérez de Ayala, me veo obligado a desmentir categóricamente todas y cada una de ellas para que no se cumpla aquello de “una mentira repetida mil veces…”.

1. Seguridad en el centro. La seguridad de toda la comunidad educativa es la prioridad absoluta para el equipo directivo. Se han reescrito protocolos obsoletos, se han realizado obras para adecuar espacios e itinerarios, se ensancharon puertas e instalaron elementos de seguridad... al ritmo que permite la asignación económica de la que disponemos para modernizar un edificio de más de 60 años y muy complejo, especialmente como consecuencia del historial de reformas que arrastra.

En el caso concreto de "seguridad covid", desde el primer protocolo publicado con motivo del final del curso 2019/20, siempre se ha informado a todos los órganos colegiados y contado con su opinión para darles la forma definitiva. Se han aceptado propuestas y sugerencias de mejora, todos se publicaron en la web del instituto y todos se enviaron a los Servicios de Salud Laboral y Prevención de Riesgos Laborales de la Consejería para su evaluación.

Centrados en el curso 2020/21, el preceptivo plan de contingencia se revisa mensualmente, se corrige cada vez que se detecta un error y se afinan los detalles que se ven mejorables. Y, como dije antes, está a disposición de quien quiera analizarlo en la web del instituto, pudiendo informar de cualquier error u omisión que exista.

2. Formación del profesorado en “nuevas tecnologías”. Desde principio de curso se están desarrollando en el IES Pérez de Ayala dos grupos de trabajo (voluntarios) sobre aspectos fundamentales para este curso.

En el caso concreto de las “nuevas tecnologías”, cincuenta docentes, de los más de cien que conforman el claustro, se reúnen quincenalmente para compartir sus conocimientos sobre las diferentes plataformas educativas de las que disponemos (Office 365, Moodle, y todas las aplicaciones que las componen), o asistir a ponencias organizadas por el Centro del Profesorado y Recursos (CPR). Aparte del grupo de trabajo, me consta que hay profesores que se han apuntado a otros cursos organizados por los CPR con esta temática.

Sin ir más lejos, en estos momentos se está desarrollando una actividad formativa para toda Asturias llamada “Uso de los dispositivos digitales para la enseñanza con Office 365”, en la que participan docentes del IES Pérez de Ayala. En mi opinión, no podría haberse organizado antes de tener los equipos en las aulas, ni tendría sentido explicar lo que no se puede aplicar.

3. Alumnado con necesidades de equipamiento. Durante todo el curso, en las reuniones de equipos docentes (RED) se estudian los casos de alumnos con dificultades, bien porque no tienen ordenador o acceso a internet, bien porque lo tienen que compartir. A todos aquellos que lo necesitaron se les prestó un punto de acceso y/o un ordenador (la Consejería nos proporcionó una treintena de equipos y puntos MiFi) o una tablet (el centro tiene un acuerdo de colaboración con la ONG “Ayuda en Acción”). Antes de recibir

el equipamiento de la Consejería, se prestaron los mismos equipos que se usaron durante el confinamiento, limpios, actualizados y funcionales, si bien más lentos que un móvil nuevo.

Más aun, cuando cualquier docente comenta al coordinador TIC que detectó un alumno o alumna con necesidades, se prepara el equipamiento y no se espera a las RED. Basta la opinión del tutor o tutora para realizar el préstamo.

4. Motivación del profesorado. Dejo para el final lo que más me preocupa de esta situación y que no aparece escrito explícitamente en ninguna crónica. Es la sensación que me transmitieron compañeros y compañeras después de leer todas esas noticias. Quien se limite a ojear los titulares y los sumarios de las noticias, quien no lea en profundidad, puede entender que "los profesores están desmotivados".

He recibido a gente cansada, preocupada y, en ocasiones, confundida por esta situación cambiante y por la velocidad con la que se modifican las normas para adaptarse a la realidad y las investigaciones sobre difusión, transmisión y ventilación. Nunca entró en mi despacho una persona “desmotivada”. Desde la primera reunión del claustro, el 7 de septiembre, siempre ha habido gente alrededor del equipo directivo y del departamento de orientación ofreciendo ayuda y apoyo. En la sala de profesorado se han ideado y llevado a cabo ideas y sugerencias para gestionar de la mejor forma posible esta difícil situación.

La página web y el Twitter del centro recogen una pequeña muestra del trabajo del profesorado, me gustaría poder invitar (pero no puedo, mandan los protocolos covid) a quien haya llegado leyendo hasta aquí a visitar las exposiciones temporales que hay en las dos entradas principales del centro: música, teatro, biología... las escaleras de las emociones y de la mujer, el trabajo del equipo bilingüe… lamento no tener espacio para escribirlo todo.

Me enorgullece representar a personas que trabajan tan duramente por sacar lo mejor posible de nuestros alumnos.

Y no quiero acabar este texto sin hablar del fantástico alumnado que acude al IES Pérez de Ayala. Casi 1.000 jóvenes nos demuestran que, contrariamente a lo que dicen por ahí, son una generación de la que se pueden esperar cosas. Llevan un año soportando una situación terrorífica, aguantando expresiones despectivas que no voy a transcribir por aquello de que “repetir mil veces una mentira…” y, aun así, acuden al centro, cumplen las normas mucho mejor que lo que veo de muchos adultos por la calle y siguen adelante día a día.

Sí, tenemos “elementos conflictivos”, pero (va un problema de matemáticas) el 1% de mil personas es… Nos quedan 990 adolescentes de los que se habla poco.

Como dije varias veces esta semana, si los adultos copamos las consultas de psiquiatría, hemos batido récords en la venta de ansiolíticos y antidepresivos… ¿cómo están ellos? Se supone que están aprendiendo a gestionar unas emociones (miedo, ansiedad, ira, tristeza…) para las que los adultos hemos recurrido a la farmacia. Y lo hacen como pueden, comportándose como niños que son, sin apenas vías de escape a toda su energía, dando ejemplo a esas personas adultas en las que todo el mundo está pensando.

Álvaro Valdés Menéndez,

director del IES Pérez de Ayala

Oviedo