Copago y desempleo
Treinta años después (con un 67% de gobierno del PSOE) se habla del copago en Sanidad y Educación. Pero que nadie se preocupe, con un 5% de reducción de sueldo para los pensionistas y funcionarios públicos (y un 40% acumulado en los últimos treinta años para muchos de ellos), no se habla de los otros empleos de empresas públicas, fundaciones y prejubilaciones. Hay que recortar gastos, pero nadie explica ni lo que se va en subvenciones a esas entidades colaboradoras del Estado sin «ánimo de lucro», ni si se ha reducido tal cantidad. (Hemos reducido el 25% del déficit público, pero no se ha reducido el gasto a pesar de tanta obra parada en imprescindibles infraestructuras; tan sólo se aumentó la recaudación de los impuestos)
Como digo, no hay de qué preocuparse. Si los sindicatos fueron capaces de ir resolviendo desde 1982 el problema de la Formación Profesional ocupacional pública estableciéndose ellos como el medio idóneo para ofrecer y satisfacer tal servicio mediante la creación y promoción de entes colaboradores sin ánimo de lucro; de igual forma se ofrecerán a resolvernos el problema de la Sanidad y la Educación de los trabajadores. ¡Y tienen razón! No hay por qué demandar servicios al Estado pudiendo demandárselos a ellos. Han demostrado sobradamente durante todo este tiempo, e incluso con la vivienda, que lo que debemos hacer es pedir menos al Estado y más a los sindicatos. Así que apoyémoslos al grito de ¡Menos Estado y más sindicato! Liberalización de los servicios públicos y de la intermediación laboral a favor de los sindicatos ¡ya! Nos ofrecerán soluciones sin ese ánimo de lucro de las empresas y aseguradoras privadas que abusan, usan, y manipulan al trabajador. Así que, como subcontratas colaboradoras de la Administración que son, cuando reciben una subvención para pagar a un trabajador le pagan íntegramente tal subvención al mismo (lo mismo da si es como subcontrata de autónomo a un profesor o experto docente). No son amorales empresas prestamistas de trabajo laboral, defienden que quien dirige y recibe los servicios del trabajador debe ser legalmente su empleador. Por eso se ofrecen como intermediarios a la Administración en servicios de FP ocupacional obviando a los funcionarios que imparten los cursos y sus funciones. Así se da el caso de funcionarios que, con más de treinta años de docencia, aún continúan sin el reconocimiento docente por parte de la Administración y los sindicatos y sin encontrar ellos problema alguno cuando el Principado de Asturias los declara a extinguir.
Por otra parte, las empresas recurren a contratas de servicios que lo son únicamente de mano de obra, y, esa práctica pseudodelictiva (el prestamismo laboral no esta permitido) ocurre porque el precio del despido hace rentable su uso en trabajos que consideran temporales o fluctuantes. Pero... ¡Nada de abaratar los despidos, eso es retroceso social! Un trabajador lo que quiere es: 1º Tener fijeza en el empleo; 2º Tener seguridad en caso de despido; 3º Cumpliéndose las dos anteriores: que la indemnización se... ¿Será la relación trilateral laboral y la subcontratación de los sindicatos por parte del Estado la solución sindical y social para los trabajadores de un futuro progresista?
Países con una fuerza sindical firme e independiente, sin que ni siquiera apenas tengan normativa alguna sobre el despido, tienen muchos menos despidos y más empleo que aquí: un país donde abundan las cesiones triangulares de trabajadores; esas relaciones laborales donde alguien se beneficia por no hacer nada. Pues ninguna empresa pagaría más por el mismo trabajo, algo que sólo hacen para no tener que indemnizar en caso de despido. Singularidad ésta que nos hace tener los mayores índices de desempleo, de trabajo temporal y de empleos públicos sin ser funcionarios o personal laboral, y todo: a un coste mayor del necesario. ¡Animo! No es el momento de reformas, sino de nuevas construcciones.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo