Los maquis no eran delincuentes
En La Nueva España de martes 27 de julio de 2010 y en "Conversaciiones en verano, de la periodista doña Cuca Alonso", leo las declaraciones de don Alberto Aguilera Acuyo, comandante de la Guardia Civil que, a una de las preguntas que le formula doña Cuca Alonso el señor Aguilera le da una respuesta que por lo menos, a mi juicio, no se ajusta a la realidad de aquellos tiempos si es que yo no lo he interpretado mal.
Veamos: cuando la periodista le pregunta ¿qué es un guardia civil en la sociedad moderna? por ejemplo, ya no hay maquis...
Usted responde: es alguien que defiende el libre ejercicio de los derechos de los ciudadanos. Aquel asunto de los maquis lo estudié en la asignatura de historia. Hoy hay otro tipo de delincuencia (...). Señor comandante: los maquis, fugaos, guerrilleros o, los del monte como se conocieron a los valientes luchadores contra la dictura de don Francisco Franco promotor y ejecutor de una guerra declarada al gobierno de la república española legalmente constituido por medio de las urnas, no eran delincuentes, no señor, simplemente, fueron defensores de unos valores democráticos que, una rebelión incomprensible, acabó con la vida de muchos miles de personas hombres y mujeres indiscriminadamente.
Pero hay algo señor comandante que me tiene confuso y es cuando usted dice: aquel asunto de los maquis lo estudié en la asignatura de Historia (...). ¿Historia escrita por los vencedores? O es historia recogida de los archivos de la guardia civil de aquellos tiempos; que para el caso seria lo mismo.
Sea como fuere señor Aguilera, puedo decirle a usted y a quien o quienes lo quieran oír o leer, que aquellas personas no escogieron el camino de su muerte por propia iniciativa si no que se vieron empujados por las circunstancias de una represión brutal y consentida al acabar la guerra civil (mejor diríamos incivil) sufrieron lo indecible antes de que la guardia civil de aquella época acabare con toda la guerrilla. Alguno como mi amigo Pepín, contando solamente 19 años. Apenas un niño. Le diré cómo murió señor Aguilera: él y otro compañero más o menos de su misma edad, al saber que estaban rodeados por la guardia civil tiraron las armas que tenían: "una pistola cada uno" y salieron con los brazos en alto y así de esta forma les "acribillaron" a tiros los valientes guardias civiles de la época. Decenas de guardias para matar a dos personas "casi niños como he dicho antes" pero las órdenes del dictador supongo que eran muy claras y tajantes. Tirar a matar. Una vez más he de decir que los/as componentes de la guerrilla opositora a la dictadura de don Francisco Franco no eran delincuentes si no, que fueron luchadores fruto de las circunstancias de una maldita guerra que ellos y ellas para nada habían promovido y a los que no les dieron tregua hasta su completa eliminación.
Por supuesto señor Aguilera que la guerrilla también cometió errores pero eran personas, eran humanos, acosados como alimañas día y noche y siempre con la guardia civil pisándoles los talones. Pienso que sus errores bien pudieren ser perdonables. Descansen en paz.
Señor comandante: si siente curiosidad por saber algo más sobre esta tema en La Nueva España tienen mi dirección completa. Muchas gracias.
Sabino Álvarez Pazos
Mieres del Camino
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