FP dual sí, sinsentidos no

No se entiende lo que lleva ocurriendo desde hace cuarenta años en materia de formación. No sé si es locura o incompetencia. Incompetencia de no ver la realidad e incompetencia de no interpretar los planos del proyecto formativo europeo: Plan de Bolonia (PB) de 1999 y Marco Europeo de Cualificaciones (EQF) de 2008. El PB es un acuerdo "que busca alinear la Universidad con la vida empresarial y reformular el paradigma de los estudios superiores para facilitar la empleabilidad de los estudiantes". Mientras que el EQF pone un marco estructural a todo lo relacionado con las ocupaciones para facilitar dicha empleabilidad a todos los niveles. Es absolutamente impensable alinear formación y empresa sin el concepto de ocupación y la definición de las ocupaciones. La ocupación es un concepto fácil de comprender. Lo crean las empresas, al ser aquello que ellas describen en una oferta de empleo con el fin de conseguir personal capacitado que ya haya trabajado en un puesto de trabajo similar; lo cual acaban denominando y describiendo en la oferta de empleo: eso es una ocupación. Por tanto, una ocupación es un conjunto de puestos de trabajo similares. Las ocupaciones se deben definir y homologar para facilitar la empleabilidad: ofertas y demandas de empleo en una ocupación. Por tanto es un sinsentido no recurrir al concepto ocupación para alinear formación y empresa, algo que no se practica en España. Expongamos algunos conceptos que lo muestran. Todo proceso formativo (como señala el EQF) se basa en dos fases: una previa inicial para adquisición amplia de conocimientos profesionales y una acreditativa final para la adquisición concreta de destrezas profesionales en una determinada ocupación. Lo que lleva a dos tipos de formación: Formación de grado inicial general y Formación de postgrado dual y ocupacional.

-Formación de grado inicial: formación de un conjunto de conocimientos (teóricos y fácticos) esenciales y básicos para un conjunto de ocupaciones similares de una familia profesional. Realizándose por tanto en una misma aula general para un conjunto de ocupaciones similares de la familia profesional significativa del centro formativo. Tal hecho permitiría luego el paso de los egresados a la formación para determinada ocupación concreta según la elección que hagan los discentes. Permitiendo así que en el futuro puedan acceder, desde esa acreditada Formación de grado inicial, a un conjunto formaciones en otras ocupaciones en busca de empleabilidad.

-Formación de postgrado dual: formación de un conjunto de destrezas (cognitivas y prácticas) dentro del campo de determinada ocupación, que culminaría con la acreditación profesional de la ocupación al ocupar un puesto de trabajo de la misma en la misma empresa. La empresa dispondría por tanto de aulas taller para exponer y enseñar las destrezas cognitivas, e incluso entrenar las prácticas antes de realizarlas en el puesto de trabajo con la maquinaria productiva esencial de la empresa (de otra forma sería un atrevimiento). Como la empresa puede ser pequeña y, por tanto no dispondría de aulas taller para sus ocupaciones (como puede hacer una gran empresa como SEAT), lo lógico sería la existencia de dichas aulas en un centro formativo instalado en los propios polígonos industriales en los que se ubican las empresas. Obviamente, estos centros dispondrían de aulas para las distintas ocupaciones en las distintas familias profesionales (incluso serían transportables). Luego no tienen que ser específicos de una misma familia profesional, como sería recomendable en el caso de la Formación de grado inicial.

Puesto que el EQF tiene ocho niveles (cuatro del PB y otros cuatro que no le pertenecen) y puesto que en España la universidad solo se ha hecho cargo de los tres últimos, nos quedan cinco para la formación profesional. Es decir: se han de estructurar cinco niveles de formación de grado inicial, y cinco niveles de formación de postgrado dual. Esta última, como es obvio, en la propia empresa en un puesto de trabajo de la ocupación. Como puede apreciarse claramente por los conceptos aquí expresados (en base al EQF) esta formación de postgrado dual debe ser permanente y continua, modular y flexible, con el fin de facilitar el empleo. Es decir: para la actualización de ocupaciones (empleados) o para nuevas acreditaciones ocupacionales con el fin de la reincorporación laboral (desempleados) o, obviamente, para la incorporación desde la formación de grado inicial (primer empleo laboral).

Ahora cojan ustedes lo que se ha filtrado del anteproyecto de ley de la Formación Profesional "una de las palancas de cambio" (https://www.lne.es/asturias/2021/06/16/fp-sera-dual-empresas-daran-53349603.html) y díganme si no llevamos cuarenta años en un sinsentido debido a la incompetencia crónica y manifiesta de este país para estructurar, conceptual y formalmente en ley, algo para lo que Europa ya ha dado instrucciones tiempo atrás: un Plan de Bolonia y un Marco Europeo de Cualificaciones.