¿Qué izquierda?
Estamos asistiendo últimamente a una obra de teatro en la que los políticos de la ¿izquierda? asumen el rol de mamporreros del capital, es decir, contra su programa electoral y su idiosincrasia aceptan que lo fundamental para el bien común es que ellos puedan seguir en el o los gobiernos, poco importa si en el camino los votantes, por lo general trabajadores y estudiantes, no están de acuerdo, ¡pero qué saben ellos!
Si a estas alturas los sabelotodo de la política sólo miran su supervivencia a cualquier precio, tienen de izquierdas lo que cualquier banquero de prestigio, es decir, si no miramos el bien común, que el déficit público no es tan importante como dice la gran banca, que el empleo público debe ser motor en época de crisis, que no se puede hacer pagar con dinero público los excesos de la banca, que no es de recibo recortar salarios (primera vez en democracia) justificando que tienes el puesto de trabajo fijo (visto lo visto, ni me lo creo), que se da otra vuelta de tuerca quitando las ayudas sociales a los trabajadores públicos, que se propugne una reforma laboral para abaratar el despido y tener más poder los empresarios y que los convenios logrados a base de esfuerzo y movilizaciones queden en el olvido, ¿para qué queremos izquierdas falsas?
De qué puede presumir el PSOE a nivel del Estado, ¿de estar al servicio de los mercados y de recibir a Obama (o sus llamadas) para que indique el camino a seguir? Para eso hay que ser más legal y en los programas electorales dejar claro que se pinta poco, que la realidad es el Fondo Monetario Internacional, el Banco Central Europeo, los EE UU y el Cristo que los fundó a todos, que no hay salida desde los preceptos de la izquierda. Para pedir el voto a los trabajadores y pensionistas hay que combatir esas políticas, se necesita una izquierda real que no esté secuestrada por realidades de los mass media, ¡cómo no!, controlados por el capital. Se necesita que la política social no esté secuestrada por advenedizos, que nos creamos que es posible salir de la crisis si todos pagamos impuestos, los empresarios de sus beneficios que parecen no tener, la banca, los trabajadores…, pero no sólo estos últimos fundamentalmente, y hacernos creer que somos los culpables de haber sido obedientes, endeudándonos con préstamos, hipotecas baratas, consumiendo para hacer un bien al sistema, y cuando llegan las duras, a volver a pagar con los puestos de trabajo y el salario, que es nuestra supervivencia.
Y en Asturias toda esa política amparada en el voto de Izquierda Unida, para qué vamos a investigar El Musel si somos Gobierno, incineradora pequeña, la obra pública con la Autopista del Cantábrico en el olvido, el AVE para el César, recorte de salarios a los funcionarios con cambio de cromos repetidos, supervivientes se dice en realidad.
Subtítulo: Los partidos progresistas y sus connivencias con los poderosos en una época de grandes necesidades sociales
destacados:
De qué puede presumir el PSOE a nivel del Estado, ¿de estar al servicio de los mercados y de recibir a Obama (o sus llamadas) para que indique el camino a seguir? Para eso hay que ser más legal y en los programas electorales dejar claro que se pinta poco
Nos hacen creer que somos los culpables por haber sido obedientes, endeudándonos con préstamos, hipotecas baratas, consumiendo para hacer un bien al sistema, y cuando llegan las duras, a volver a pagar con los puestos de trabajo y el salario, que es nuestra supervivencia
Pero lo peor es que todo cabe, el papel lo aguanta todo, de nada sirve decir que en Europa lo que dice Blanco de los impuestos es una tontería, estamos dentro de los indicadores económicos de la Unión Europea; UE de los 27 países, el 24 de 27 en gastos de educación, estamos en la mitad de la tabla de los 27 en sanidad, estamos en la media de impuestos recaudados en tanto por ciento sobre el PIB, hasta 2007 el 37,1%, lejos de Suecia, el 48,3%, Bélgica, el 44%, o Italia, el 43,3% (sí Italia), y en salarios en la mitad de la tabla con una media de coste laboral, según esos datos, de 2.283,8 euros, señor Blanco, no diga tonterías.
Pues eso, ¿qué izquierda? Bla, bla, bla…
Jesús González Alonso
Secretario general de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CC OO de Asturias
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